La vida diaria impone tiempos que están muy alejados del ritmo natural del cuerpo, por lo tanto, genera consecuencias indeseables como el estrés y la ansiedad. Si no se controla a su debido tiempo puede traer consecuencias nefastas para la salud.
El ritmo de vida en la actualidad trae aparejado un sinfín de malestares que es posible evitar. Justamente, tener una rutina sumamente atareada lleva a una persona a alcanzar niveles de estrés insospechados que podrían afectar su salud a corto y a largo plazo.
Si se quiere mantener un estado de salud integral es necesario aclarar a qué se refiere específicamente dicho concepto. Precisamente, desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) se informa que “la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”.
Partiendo de este precepto es necesario cuidar varios aspectos de la vida, para lograr un estado completo de bienestar en todos los niveles. En este sentido, es válido aclarar que la sexualidad es parte integral del placer del ser humano, por lo tanto, no se debe dejar de lado. Vivir en continua presión puede traer aparejados problemas de salud de índole sexual como es la eyaculación precoz y la disfunción eréctil.
Tips para lograr un estado óptimo de bienestar
Un estado óptimo de bienestar deberá incluir lo físico, mental y social, tal como lo menciona la OMS. Por lo tanto, comenzar con cuidar el físico es uno de los puntos clave para alcanzar un estado de excelencia.
Lo ideal es cuidar la alimentación y la actividad física, ya que son los pilares de una vida saludable. Reemplazar los alimentos procesados por aquellos que son más naturales, como lo son las frutas y las verduras. Para ello, es necesario evitar alimentarse con productos que se realizan en fábricas, ya que por lo general están saturados de azucares, sales y grasas transgénicas. Los mismos alteran el bienestar del organismo, pues no aportan los nutrientes necesarios para lograr un equilibrio saludable. La actividad física no se debe olvidar y comenzar lentamente con caminatas cortas, para luego ir aumentando la frecuencia además del tiempo.
Obviamente, no dejar de lado el estado emocional, ya que repercutirá de modo negativo en el estado mental de un individuo. En este sentido, la OMS afirma que “la salud mental se define como un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad”.
Por último, es válido destacar que lo más aconsejable es bajar los niveles de tensión con técnicas de meditación, natación o cualquier actividad que le permita al individuo en cuestión alcanzar un estado de relajación absoluta, al menos unos minutos al día. De este modo, tendrá las herramientas necesarias para afrontar la rutina diaria de un modo mucho más saludable y sin padecerla.