Si tienes un problema que crees que puedes curar o aliviar con esta técnica, o si simplemente estás interesado en saber cuáles son los beneficios y los efectos de esta práctica, a continuación, podrás encontrar toda la información que necesitas para poder tomar una decisión.
¿Qué es la magnetoterapia y en qué consiste?
La terapia con imágenes es una terapia en la que se aprovechan los campos magnéticos de los imanes para mejorar la salud del paciente o de la persona tratada.
Es una terapia que se practica desde hace cientos de años, pero en los últimos años se ha vuelto más popular debido a que cada vez son más las personas que la usan, incluso distintos clubes deportivos han comenzado a usarla como una terapia complementaria para conseguir una correcta y rápida recuperación en caso de lesiones.
En pocas palabras, la magnetoterapia consiste en usar imanes para tratar enfermedades y problemas del cuerpo aprovechando la acción de los campos magnéticos que son producidos por los imanes.
Los imanes que se usan para producir los campos magnéticos pueden ser electroimanes o permanentes. Los electroimanes solo funcionan cuando han sido conectados a la corriente eléctrica y tienen un campo magnético que puede variar.
Las imágenes que se usan en la magnetoterapia pueden tener distintos tamaños y distintas formas, lo que significa que el campo magnético de los imanes también puede variar dependiendo de las indicaciones del terapeuta y de los problemas que se quieran tratar.
¿Cuáles son los beneficios de la magnetoterapia?
Esta técnica representa muchos beneficios para la salud, además de que son muchos los campos de la salud que se ven beneficiados:
- Sirve para aumentar los glóbulos rojos y promover la salud celular.
- Eficaz para aliviar los dolores causados por la artritis, reumatismo, hinchazones o incluso dolores de cabeza.
- Ioniza la sangre, lo que hace que fluya con más facilidad.
- Mejora el funcionamiento del sistema inmunológico.
- Mejora el funcionamiento del corazón y sirve para normalizar la presión arterial.
- Ayuda a mejorar el cuerpo luego de una lesión.
- Puede usarse para tratar el insomnio, vértigo, falta de memoria, síndrome premenstrual, etc.
- Sirve para tratar trastornos digestivos.
¿Cómo se aplica el tratamiento con la magnetoterapia?
La terapia con imágenes se puede aplicar de forma local, es decir, solo en la zona afectada, pero también se puede aplicar de forma general y tratar todo el cuerpo.
Por lo general, la primera sesión debe tener una duración aproximada de 10 minutos. La duración de cada sesión irá aumentando de forma gradual hasta que llegue a los 20 o 30 minutos de duración.
Cuando el problema haya sido curado o solucionado se puede seguir usando la terapia como una media preventiva para evitar la aparición de futuros problemas.
Contraindicaciones de la magnetoterapia
En el caso de las contraindicaciones de este tipo de terapias hay dos tipos, las contradicciones absolutas y las relativas, y se debe evitar en los siguientes casos:
Contradicciones absolutas:
- Si se usan dispositivos como marcapasos, desfibrilador, implantes de oído, etc.
- Durante hemorragias de cualquier origen: El campo magnético puede aumentar el flujo sanguíneo de los tejidos, lo que aumentaría el sangrado.
- Durante el embarazo.
- En casos en los que el origen del dolor sea desconocido.
Contraindicaciones relativas:
- En casos de un tumor diagnosticado y luego de la operación de un tumor maligno, o durante el tratamiento de quimioterapia y radioterapia.
- Durante casos de hiperfunción de las glándulas endocrinas
- En casos de enfermedad infecciosa y a una temperatura mayor a los 38°C.
- Enfermedades neurológicas con ataques de epilepsia.
- Tuberculosis activa.
- Enfermedades graves por micosis.
- No se debe combinar con radioterapia.
Antes que nada, se recomienda visitar un terapeuta experimentado que merezca tu absoluta confianza, ya que él decidirá si puedes o no tratar tus malestares con magnetoterapia.
