Los componentes para servidores conforman un mercado que comienza bien este año, habiéndose registrado un crecimiento combinado del 12,4% interanual en el pasado mes de febrero. Esta meta-categoría está formada por segmentos de producto agrupado, consistentes en componentes para servidores como memoria RAM, unidades de procesamiento (CPUs), SSD y discos duros.
Al igual que ha sucedido en otros segmentos de mercado del ámbito informático, el crecimiento vino de la mano de una serie de tendencias, el incremento de la RAM y la llegadas de las unidades de estado sólido.
Los datos se deben madurar aún
El estancamiento de la venta de procesadores y la estabilización de la de unidades de estado sólido después del importante aumento del año pasado, han hecho que las memorias RAM fueran el componente más destacado a la hora de alimentar estos sistemas computacionales en servidores.
Estos datos deben tomarse con prudencia, ya que el incremento de ingresos no se debió al mayor número de unidades vendidas, sino al aumento de la capacidad de los módulos DIMM de 32 Gbytes o superiores, y al mayor precio de venta registrado en el sector a lo largo de los dos últimos años.
¿Se están recuperando los servidores pre-configurados?
Se observan ciertos síntomas de recuperación en sistemas de servidores pre-configurados, que tan solo han experimentado una caída del 4,7%, frente a los dos dígitos que se experimentaron el año pasado. También se ha destacado como animadores la llegada de los nuevos procesadores AMD EPYC al canal de distribución.
Un dato también relevante, y conocido hace tiempo ya, es la caída de ingresos por la venta de discos duros a medida, los cuales están siendo reemplazados por soluciones de almacenamiento sólido como SSDs.
Si se analizan los ingresos de componentes para servidores por países, se puede ver una gran disparidad en el comportamiento de este mercado. Mientras que se dan fuertes subidas en Turquía, Dinamarca o Bélgica, tienen lugar enormes caídas en España, Francia o Italia.
¿En qué consiste el hosting?
Aunque se lleve mucho tiempo utilizando el ordenador, y se sepa navegar por Internet, esto no significa ni con mucho ser experto. Algo que se nota especialmente cuando se tiene una gran idea de negocio, y comienzan a aparecer palabras y siglas que no se entienden muy bien, pero que son muy importantes para que ese negocio funcione.
En toda página web tiene que existir siempre un buen hosting con cPanel. El hosting es un servidor en el que se aloja el negocio online, y la forma en que los posibles clientes de la tienda pueden conocer los contenidos de esta. Es fundamental contratar un buen hosting para que el negocio pueda recibir visitas sin problema alguno.
La idea debe estar muy bien desarrollada, para así saber qué es lo que se quiere y lo que se necesita. No es igual una tienda, en la que se compran productos, que un blog, donde los usuarios simplemente leen. Sin duda, la primera es mucho más completa, y necesita un buen soporte que cargue con todo ese trabajo y permita que este no se caiga. Todo buen hosting tiene que ofrecer una buena capacidad de almacenamiento y velocidad.