Viajar por el mundo sin dinero suena como un sueño, un sueño lejano, imposible. Pero en realidad es factible hacerlo. Es conveniente tener prudencia en los gastos, porque hay algunos que no deben hacerse, por ejemplo, el seguro de viaje.
Hay muchas maneras de viajar con un presupuesto limitado, incluidas muchas formas en las que es posible viajar de forma gratuita. En tiempos que no son financieramente fáciles, viajar parece ser un lujo, pero no hay que olvidar que ayuda a adquirir nuevas fuerzas, e inclusive conocerte a ti mismo, por lo que es muy positivo hacerlo aunque tu presupuesto sea muy ajustado.
¿Cómo hacer el viaje soñado y con poco presupuesto?
Viajar barato se trata de aprovechar las aplicaciones y sitios web útiles que permiten ahorrar dinero al viajar, encontrar formas de reducir los gastos mientras aún pueda darse el lujo de hacer lo que la persona desea. Por otro lado, viajar gratis implica aprovechar el alojamiento gratuito, el transporte y las actividades que ya existen y reducir su coste a cero. Lamentablemente, se sacrifica la comodidad y no es posible extender el viaje el mayor tiempo posible.
Tener un presupuesto ajustado, pero desearlo y prepararse para lograr el objetivo es posible hacerlo realidad. Aunque no se se tenga un buen ingreso o se tengan deudas, todavía hay muchas maneras de ir al extranjero. Puede que no sean lujosos, pero si el viaje es prioridad, definitivamente se puede. A continuación, ciertos consejos a tener en cuenta:
- Ser flexible: el precio de los vuelos puede variar considerablemente según el mes, el día e incluso la hora de viaje, así que es conveniente comparar los precios de los vuelos en un mes entero para poder ver los días más baratos para volar.
- Ampliar el horizonte de viaje: lo importante debe ser viajar y que sea barato. Las opciones de búsqueda en todas partes enumeran los vuelos más baratos desde el aeropuerto local en orden de precio. Podría terminarse con una ganga y descubrir una verdadera joya escondida.
- Ser preciso en la fecha: durante las vacaciones de verano los precios aumentan considerablemente. Pero no hay que olvidar que en la Pascua y en la Navidad también son más caros. Viajar fuera de temporada significa vuelos más baratos y destinos menos concurridos, una situación ganar-ganar.
Los beneficios de viajar
Tener poco tiempo o dinero no es una excusa válida. Hoy en día existen infinidad de opciones para viajar muy barato y de forma fácil. No importa tener un trabajo de tiempo completo y familia a la cual atender, puede viajarse los fines de semana o días festivos, incluso con un bebé. Estos son algunos de los principales beneficios de viajar:
- Mejora la salud: para algunas personas viajar es una cura para la depresión y la ansiedad. Por supuesto, no es una cura infalible, pero podría ayudar a sentirse mejor, tanto física como psicológicamente.
- Viajar desconecta: se tiende a estar tan atrapados en la vida cotidiana que a veces simplemente quedarse puede causar más daño que bien. ¿El jefe es muy insistente, los niños son muy traviesos, hay mucha presión? Viajar, desconecta a la persona de todo el estrés del día.
- Aprendizaje constante: se aprenden nuevas palabras en un idioma diferente cada vez que se viaja. Incluso, más que solo idiomas, viajando se conoce la cultura e idiosincrasia de otros países.
No es una mala opción viajar, es la forma más natural de inducir la sensación de que la persona extraña a alguien o de que lo extrañan. El objetivo es rejuvenecer la mente para afrontar las responsabilidades diarias.
La importancia de viajar y regresar renovado
Lo mágico del hogar es que se siente bien irse y se siente aún mejor regresar. Por un lado parece que se regresa donde empezó todo, porque las cosas siguen iguales, la misma configuración, la misma gente, los mismos problemas. Sin embargo, el viajero regresa renovado, está lleno de nuevas ideas, por lo tanto, valora lo que tiene.
Buscar los vuelos más baratos es una actividad que muchos hacen, pero puede costar encontrar lo mejor, especialmente si no se sabe dónde buscar o cuándo. Lo importante es tener en mente el deseo de viajar. Entrar en la rutina es contraproducente, porque la productividad de la persona merma considerablemente. Cuando se regresa de un viaje, se tiene otra visión y energías positivas para avanzar.
