Se trata de un organismo cuyo principal objetivo es llegar a la sostenibilidad y a la eficiencia energética tanto de empresas como en viviendas particulares, ayudando además a reducir, todo lo posible, los costes energéticos y de consumo en dichos espacios.
Cuando se habla de consultoría energética se está haciendo referencia a un organismo que tiene como principal objetivo ayudar, tanto a empresas como particulares, a reducir al máximo los costes ocasionados por el consumo de energía. Las consultorías se encuentran en una búsqueda constante de la sostenibilidad y la eficiencia energética, para ahorrar todo lo posible tanto en energía como en ciertas facturas, siendo la habitual, la de la luz.
A la hora de contratar una consultoría energética en Madrid, una de las primeras cosas que se plantean es desarrollar un plan estratégico de ahorro, teniendo como base reducir la contaminación y, por consiguiente, también el impacto sobre el medio ambiente. Hay que decir que estos profesionales no solo ofrecen sus servicios para las industrias y las grandes empresas, también hacen lo propio con las viviendas de particulares, puesto que todos estos espacios pueden presentar este tipo de situaciones.
En el caso de las viviendas, uno de los objetivos es el ahorro en la factura de la luz; mientras que, para las industrias, se establece el continuar con una producción más eficiente sin que haya que aumentar el consumo de energía para ello.
En cualquier caso, lo que está claro es que la eficiencia energética cada vez está cobrando mayor protagonismo, sabiendo que los recursos de la tierra no son infinitos y, por tanto, hay que aprovecharlos al máximo para que duren mucho más tiempo.
¿Qué hacen en este tipo de consultorías?
Sabiendo la importancia de estos profesionales, hay que decir que las consultorías energéticas llevan a cabo numerosas tareas con el fin de llegar a esa eficiencia tan necesaria. ¿Cuáles son los trabajos más comunes?
Rehabilitación de edificios
Aunque algunos piensen lo contrario, lo cierto es que, una de las funciones principales de una consultoría de estas características es la rehabilitación de edificios en Madrid o en cualquier otro punto que sea necesario. Estas tareas pasan por intentar mejorar la eficiencia energética todo lo posible, con la correspondiente reducción de costes en la factura y en el propio consumo.
En este sentido, lo habitual es que estos profesionales actúen directamente sobre el aislamiento térmico, al igual que hacen lo propio con los sistemas de producción y otros sistemas que emiten frío o calor. El objetivo no es otro que intentar recuperar el edificio y de esta manera, aminorar el impacto ambiental, debido a que, una obra nueva o demolerlo, sería mucho más perjudicial.
Ahorro
Por otro lado, las consultorías se dedican a optimizar todo lo posible el consumo energético y precisamente por ello, crean un plan para poder implantar medidas que supongan el ahorro deseado, dependiendo de cada instalación.
Ingeniería
A través de los servicios de ingeniería, estas consultorías llevan a cabo todo tipo de tareas para que las instalaciones funcionen de manera mucho más eficiente. Así, se realizan análisis previos, también estudios de viabilidad y, en función del diagnóstico, ponen en marcha diferentes tipos de instalaciones para conseguir esta sostenibilidad.
Emisiones
Es evidente que el cambio climático es una realidad y, gran culpa de lo que está ocurriendo lo tienen las emisiones que se dan a partir de las acciones llevadas a cabo por el hombre. Para evitarlo, estos profesionales calculan las emisiones emitidas por una empresa o vivienda, crean un plan para reducirlas de manera eficiente y, si fuera necesario, otro para la compensación de las mismas.
Homologados y cualificados
En el caso de querer contratar los servicios de una consultoría energética, es esencial asegurarse de que cuentan con las certificaciones oportunas y que, además, tienen la competencia de poder otorgarlas a los edificios que correspondan según su cualificación. Así, estos expertos podrán llevar a cabo auditorías energéticas y deben conocer a la perfección todas las herramientas de gestión de la energía, así como los estándares internacionales. Algunas de las certificaciones que no pueden faltar en todo esto son la de Huella de Carbono, ISO 50001, LEED o IPMVP, entre otras.