La gestión del presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, continúa siendo objeto de controversia tras los acontecimientos del 29 de octubre, una jornada marcada por una DANA y las posteriores riadas que afectaron gravemente a la región. Ese día, Mazón asistió a una comida de trabajo en la que, según la Generalitat Valenciana, actuó en su calidad de presidente del Partido Popular (PP) valenciano y no como representante del gobierno autonómico. Esta aclaración ha suscitado un intenso debate sobre la pertinencia de su presencia en un evento social en un momento crítico para la comunidad.
La oposición ha exigido explicaciones y mayor transparencia sobre esta reunión, que tuvo lugar en el restaurante El Ventorro de València entre las 15 y las 18 horas. Según fuentes oficiales, el encuentro se realizó con la periodista Maribel Vilaplana, con el objetivo de explorar su posible incorporación como directora de la televisión autonómica À Punt. Sin embargo, las críticas no se han hecho esperar, especialmente por parte del grupo socialista, que ha cuestionado la conveniencia de llevar a cabo este tipo de encuentros durante una situación de emergencia climática. Los socialistas han solicitado la presentación de la factura de la comida, una demanda que ha sido desestimada por la administración autonómica, que sostiene que dicha reunión no fue financiada con fondos públicos.
Desde el Partido Popular, se ha defendido la actuación de Mazón. La vicesecretaria de Sanidad y Educación del PP, Ester Muñoz, respaldó las explicaciones ofrecidas por el presidente valenciano, asegurando que la comida no fue sufragada con recursos de la Generalitat. Muñoz destacó que es habitual que los presidentes autonómicos que también lideran sus partidos mantengan reuniones de este tipo, aunque admitió no tener información sobre cómo se abonó la factura. A pesar de las controversias, la dirección del PP ha instado a centrar los esfuerzos en la reconstrucción de la comunidad tras los desastres naturales sufridos.