Shamsud-Din Jabbar, un veterano del ejército estadounidense, es el principal sospechoso del ataque terrorista en Nueva Orleans que dejó un saldo trágico de 15 muertos. Según informes del FBI, Jabbar estaba “100% inspirado” por el grupo terrorista Estado Islámico (ISIS) y había grabado una serie de vídeos en los que manifestaba su lealtad a la organización extremista.
Las autoridades están investigando el proceso de radicalización de Jabbar, quien, según el subdirector asistente de la división de contraterrorismo del FBI, Christopher Raia, actuó solo en este ataque. Raia afirmó en una rueda de prensa que “no se evalúa en este momento que haya alguien más involucrado en este ataque aparte de Shamsud-Din Jabbar”.
Detalles del ataque y la investigación
El ataque ocurrió en la madrugada del 1 de enero de 2025, cuando Jabbar embistió con su camioneta a una multitud que celebraba el Año Nuevo en Bourbon Street. Posteriormente, salió del vehículo y abrió fuego contra los agentes de policía que respondieron a la emergencia. Además de las 15 víctimas fatales, otras 35 personas resultaron heridas en el ataque.
En el lugar del ataque, se encontró una bandera del ISIS en el vehículo de Jabbar, así como dos dispositivos explosivos improvisados que había dejado en la zona. Las grabaciones que realizó, descritas como “escalofriantes” por la cadena CNN, incluyen sus planes de reunir a su familia para una falsa “celebración” con la intención de asesinarlos, aunque luego cambió de idea y decidió unirse a ISIS.
Jabbar, quien sirvió en el ejército de 2007 a 2015 y continuó en la Reserva hasta 2020, estuvo desplegado en Afganistán entre 2009 y 2010. La conexión entre este ataque y una explosión de un Tesla Cybertruck en Las Vegas, ocurrida días antes, está siendo investigada por las autoridades federales, aunque no se ha confirmado ninguna relación directa.
La radicalización de individuos con antecedentes militares plantea serias preguntas sobre la seguridad y la vigilancia en torno a aquellos que han servido en las fuerzas armadas. Este caso subraya la necesidad de abordar el extremismo en todas sus formas y de implementar medidas efectivas para prevenir futuros ataques.
