Cuatro adolescentes han sido detenidos en Ekaterinburgo, Rusia, acusados de planear un atentado terrorista y de tener vínculos con una organización terrorista prohibida en el país. Los jóvenes, de entre 15 y 16 años, habrían estado preparando un ataque utilizando un artefacto explosivo improvisado en una zona pública.
Según el Servicio Federal de Seguridad (FSB), el grupo compartía la ideología de una organización terrorista no identificada, lo que ha llevado a las autoridades a tomar medidas enérgicas. Durante la investigación, se confiscó material para la fabricación de explosivos y equipos de comunicación que contenían instrucciones para la elaboración de bombas. Además, se han recopilado pruebas que vinculan a dos de los sospechosos con un incendio provocado en un vehículo policial.
Confesiones y motivaciones
En un video divulgado por el FSB, uno de los detenidos admitió haber participado en el incendio del coche policial, afirmando: “Cometimos un incendio, grabé un video del coche siendo quemado. Después de eso, tuve la idea de hacer y probar explosivos. Le pedí a un amigo que me ayudara con esto”. Este testimonio pone de manifiesto la influencia de ciertos grupos radicales en la juventud, ya que dos de los adolescentes se habrían radicalizado tras suscripciones a canales neo-nazis en Telegram, donde encontraron llamados a la acción contra las fuerzas de seguridad.
Otro de los detenidos confesó haber colaborado en la creación de un temporizador para el artefacto explosivo y en su ensamblaje, indicando: “Acepté ayudar a hacer un temporizador y explosivos”. Estas declaraciones revelan no solo la peligrosidad de sus intenciones, sino también la organización y planificación detrás de sus acciones.
Las autoridades rusas han abierto un caso criminal bajo varios artículos del Código Penal ruso, que incluyen la preparación de un acto terrorista, la posesión ilegal de explosivos y la fabricación ilegal de explosivos. Este incidente resalta la creciente preocupación sobre la radicalización entre los jóvenes en Rusia y la necesidad de abordar este fenómeno desde una perspectiva social y educativa.
