El juez de Manhattan que preside el juicio por el caso de los pagos secretos de Donald Trump ha rechazado la solicitud de desestimación del caso y ha fijado la fecha de sentencia para el 10 de enero de 2025, tan solo diez días antes de su posible toma de posesión como presidente por segunda vez. El juez Juan Merchan ha indicado que Trump puede comparecer de manera presencial o virtual para la sentencia y ha señalado que el presidente electo recibirá una descarga incondicional, evitando así la prisión.
En su fallo, Merchan argumentó que no existe un impedimento legal para la sentencia y que la inmunidad presidencial probablemente se aplicará una vez que el acusado asuma su cargo. “Es imperativo que este tribunal programe la imposición de la sentencia antes del 20 de enero de 2025. Solo al dar una resolución definitiva a este asunto se servirán todos los intereses”, escribió el juez.
Reacciones de la defensa y contexto del caso
El equipo legal de Trump ha criticado la decisión del juez de avanzar con la sentencia, calificando el caso de motivado políticamente. Steven Cheung, portavoz de Trump, afirmó que el expresidente “debe poder continuar con el proceso de transición presidencial y ejecutar los deberes vitales de la presidencia, sin obstáculos por los restos de esta o cualquier caza de brujas”.
El caso de los pagos secretos se centra en las transacciones realizadas a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels durante la campaña presidencial de 2016. Los fiscales alegan que Trump falsificó registros comerciales para ocultar estos pagos. Trump ha negado las acusaciones y ha rechazado de manera constante las afirmaciones de irregularidades, sosteniendo que es víctima de un abuso de poder por parte de los fiscales.
En 2023, Trump fue acusado de reportar incorrectamente los pagos secretos, con el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, elevando lo que normalmente sería un delito menor a 34 cargos de felonía, uno por cada mención de los pagos en los registros de Trump. En mayo de 2024, fue declarado culpable de todos los cargos.
La defensa ha intentado en repetidas ocasiones desestimar el caso, citando un fallo de la Corte Suprema de EE. UU. que otorga a los presidentes una amplia inmunidad de enjuiciamiento penal por acciones oficiales tomadas mientras están en el cargo. Sin embargo, el juez Merchan dictaminó que esta inmunidad no se extiende a las acciones realizadas antes de la presidencia de Trump. La sentencia ha sido pospuesta en varias ocasiones, inicialmente programada para el 11 de julio de 2024, luego retrasada al 18 de septiembre de 2024 y posteriormente al 26 de noviembre de 2024.
Este caso es uno de los últimos enredos legales que enfrenta Trump, después de que el fiscal especial Jack Smith desestimara cargos en dos casos federales relacionados con el presunto manejo indebido de documentos clasificados y los intentos de bloquear la certificación de la victoria electoral de Joe Biden en 2020. Además, un juez de Georgia desestimó ocho de los trece cargos a nivel estatal relacionados con la manipulación electoral tras la victoria de Trump en las elecciones presidenciales de 2024.
