El primer ministro británico, Keir Starmer, y el presidente francés, Emmanuel Macron, han reafirmado su compromiso de fortalecer la alianza entre el Reino Unido y Francia en un contexto internacional cada vez más polarizado hacia la extrema derecha. Este jueves, Macron visitó a Starmer en la residencia oficial de Chequers, donde ambos líderes discutieron temas cruciales como los conflictos en Ucrania y Oriente Medio, así como el futuro de las relaciones entre Londres y Bruselas ante la inminente llegada a la Casa Blanca del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.
Starmer destacó la importancia de la colaboración en «tiempos de incertidumbre» y subrayó que la prioridad en el caso de Ucrania es asegurar que el país se mantenga en la «posición más fuerte posible» frente al ejército ruso. Esta postura contrasta con la intención de Trump de resolver el conflicto «en 24 horas», una propuesta que podría implicar la cesión de territorio ucraniano a Rusia.
Tensión con Musk
La reunión entre Starmer y Macron se produce en un momento de creciente tensión con el multimillonario estadounidense Elon Musk, un aliado cercano de Trump. Recientemente, Musk criticó al Gobierno laborista británico por su negativa a reabrir investigaciones sobre abusos sexuales a menores en varias ciudades del norte de Inglaterra. En respuesta, Starmer defendió la integridad de su administración, acusando a Musk de propagar «desinformación y mentiras» para proteger sus propios intereses.
La influencia de Musk en la política británica se ha vuelto más evidente, con informes que sugieren que está considerando formas de desestabilizar al Gobierno laborista, incluso apoyando económicamente al partido populista de derecha Reform UK y a figuras de extrema derecha como Tommy Robinson. Esta situación ha suscitado preocupaciones sobre la propagación de información falsa y su impacto en la estabilidad del Gobierno, especialmente tras la ola de violencia xenófoba que afectó al país el pasado agosto.
Injerencias externas
Macron ha señalado la intervención de Musk en la política europea, acusándolo de apoyar abiertamente al partido de extrema derecha Alternativa por Alemania (AfD) durante la campaña electoral en Alemania. Esta situación es irónica, dado que Trump había denunciado previamente cualquier injerencia externa en las elecciones estadounidenses, cuando miembros del Partido Laborista británico apoyaron a la candidata demócrata Kamala Harris en estados clave.
En su encuentro, Starmer y Macron también abordaron la necesidad de una mayor cooperación en temas migratorios, con Starmer enfatizando su compromiso en la lucha contra las bandas de tráfico de personas. Ambos líderes buscan acercar posturas en materia de seguridad y defensa, en un esfuerzo por fortalecer las relaciones entre el Reino Unido y la Unión Europea.
Starmer tiene previsto asistir a la reunión de los líderes de los 27 en Bruselas el próximo 3 de febrero, y se está considerando su participación en una cumbre internacional sobre inteligencia artificial en Francia el 10 y 11 de febrero. Esta cumbre podría representar la primera interacción cara a cara entre los líderes europeos y Musk tras sus recientes enfrentamientos.