La Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) ha informado sobre la desarticulación de un presunto complot terrorista de origen ucraniano, dirigido contra el personal de una empresa del sector de defensa en la ciudad de Yaroslavl. Según la agencia, el sospechoso, un ciudadano ruso que trabajaba para Kiev, tenía la intención de envenenar a los empleados de la instalación utilizando sustancias tóxicas.
El individuo fue detenido tras recibir dos contenedores con “químicos peligrosos”, que, según el FSB, habían sido preparados por los servicios especiales ucranianos. Las sustancias en cuestión pueden provocar quemaduras respiratorias potencialmente mortales, lo que subraya la gravedad del plan.
Detalles del complot y antecedentes
El plan del sospechoso incluía verter los químicos en los conductos de aire de los vehículos utilizados por los trabajadores de la empresa de defensa. La FSB ha enfatizado que las actividades del terrorista estaban coordinadas desde territorio ucraniano a través de aplicaciones de mensajería en internet extranjeras.
Yaroslavl, situada a orillas del río Volga y a unos 250 kilómetros al noreste de Moscú, cuenta con una población de más de 570,000 habitantes y es la capital de la región homónima. Este incidente no es un caso aislado; el FSB ha señalado que, desde el inicio del conflicto en Ucrania, los servicios de inteligencia de Kiev han intentado llevar a cabo ataques utilizando sustancias tóxicas en varias ocasiones dentro de Rusia.
En un incidente anterior, un agente ucraniano fue detenido por intentar envenenar alimentos y bebidas en un evento de graduación de una escuela de pilotos militares en la ciudad de Armavir. Asimismo, cuatro personas fueron arrestadas en San Petersburgo mientras planeaban contaminar productos alimenticios destinados a las tropas rusas en el frente.
En febrero del año pasado, se frustró un ataque terrorista en la región de Zaporozhye, donde se incautaron agentes químicos diseñados en Estados Unidos de los sospechosos. Estos eventos ponen de manifiesto la complejidad y la peligrosidad de la situación actual en la región, así como el uso de tácticas extremas en el contexto del conflicto entre Rusia y Ucrania.