El presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, consideró la posibilidad de indultar a su predecesor, Donald Trump, antes de dejar el cargo, según un informe de NBC News que cita a una fuente de la Casa Blanca. Esta revelación se produce en un contexto de múltiples cargos criminales federales que enfrenta Trump, los cuales han sido calificados por él como una persecución política destinada a impedir su regreso a la presidencia en las elecciones de 2024.
Según el informe, Biden “reflexionó en privado” sobre la idea de indultar a Trump tras su victoria en las elecciones de 2024, describiéndolo como “un gesto magnánimo”. Sin embargo, un funcionario de la Casa Blanca aclaró que, “hasta donde sabemos, esto no fue planteado”.
Contexto de las elecciones y la situación legal de Trump
Los casos federales contra Trump se complicaron tras un fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos sobre la inmunidad presidencial en julio. A pesar de estas dificultades legales, Trump logró ganar tanto el voto popular como el Colegio Electoral en noviembre, superando a la vicepresidenta Kamala Harris en todos los estados clave.
Biden, quien ganó las elecciones de 2020 con el mayor número de votos en la historia de EE.UU., había prometido inicialmente ser un presidente de un solo mandato y ceder el puesto a Harris. Sin embargo, decidió presentarse a la reelección, enfrentándose a presiones dentro del Partido Demócrata para que se retirara de la carrera en julio, tras un intento de asesinato contra Trump. Finalmente, Biden respaldó a Harris como su sucesora.
Según NBC, Biden dejará el cargo con “una nación dividida, un partido en ruinas” y con los estadounidenses cuestionando su compromiso con el estado de derecho. Recientemente, el presidente conmutó las penas de 2,500 delincuentes por drogas, argumentando que estaban cumpliendo “penas desproporcionadamente largas” bajo las leyes actuales.
Biden afirmó en un comunicado: “He emitido más indultos y conmutaciones individuales que cualquier presidente en la historia de EE.UU.” Su indulto más controvertido fue el otorgado a su hijo, Hunter Biden, quien fue condenado el año pasado por violaciones de leyes federales de armas y fiscales. Este indulto abarca delitos que Hunter “ha cometido o puede haber cometido” entre el 1 de enero de 2014 y el 1 de diciembre de 2024, un periodo que se extiende más allá de los delitos en cuestión y abarca su tiempo en la junta de la empresa energética ucraniana Burisma.
Republicanos han acusado a Hunter de vender acceso a su padre, quien era vicepresidente en ese momento, citando una serie de correos electrónicos y mensajes encontrados en el portátil de Hunter en 2020.
