La firma Digital Currency Group (DCG), fundada por Barry Silbert, ha llegado a un acuerdo con la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) para pagar 38,5 millones de dólares en concepto de penalizaciones civiles por haber engañado a los inversores sobre la situación financiera de Genesis Global Capital, un prestamista de criptomonedas que formó parte del conglomerado. Este caso pone de relieve las dificultades que enfrenta el sector de las criptomonedas tras la quiebra de importantes actores como FTX, que provocó una contagión en la industria.
Genesis, que fue un pilar fundamental dentro de DCG, se vio abocada a solicitar protección bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras en enero de 2023. Según la SEC, la empresa y su ex-CEO, Soichiro «Michael» Moro, ofrecieron una imagen engañosa de la salud financiera de Genesis en medio de una crisis de confianza que ha afectado gravemente al sector.
Contexto del Acuerdo y Reacciones
La SEC ha afirmado que la falta de transparencia de DCG y Moro, que incluyó minimizar el impacto de la quiebra del fondo de cobertura Three Arrows Capital, fue un factor clave en la decisión de imponer sanciones. Sanjay Wadhwa, director en funciones de la división de aplicación de la SEC, enfatizó la importancia de que las empresas actúen con honestidad, especialmente en tiempos de inestabilidad financiera.
Desde DCG, un portavoz expresó que la empresa se siente satisfecha de haber concluido la investigación, subrayando su compromiso con la integridad en las operaciones comerciales. En un contexto donde la regulación del sector de criptomonedas se encuentra en constante evolución, tal vez este acuerdo sirva como una oportunidad para que las empresas del sector se adapten a las nuevas exigencias del mercado.
Es importante señalar que, a pesar de este acuerdo con la SEC, DCG y Moro no admiten ni niegan las acusaciones de haber violado la Ley de Valores de 1933. Este matiz legal resalta un aspecto común en el entorno empresarial actual: las empresas, incluso cuando enfrentan sanciones, buscan mantener una narrativa positiva que les permita seguir adelante y centrarse en el crecimiento, algo que puede ser visto como una forma de resiliencia ante la adversidad.
En un movimiento paralelo, la Fiscal General de Nueva York, Letitia James, anunció en mayo de 2024 un acuerdo por 2.000 millones de dólares con Genesis para compensar a los inversores que se sintieron defraudados. Este tipo de acciones legales resuena en un contexto donde las criptomonedas continúan siendo objeto de atención tanto por su potencial como por los riesgos asociados a su volatilidad.