La Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Alemania ha anunciado su intención de implementar leyes de inmigración más estrictas, incluso si para ello debe contar con el apoyo del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD). Este movimiento marca un hito significativo, ya que es la primera vez que un partido político tradicional alemán se muestra dispuesto a colaborar con el AfD, que ha sido objeto de un «muro» político por parte de los partidos convencionales desde su fundación en 2013.
En una carta dirigida a los miembros del partido, la dirección de la CDU ha afirmado que sus legisladores presentarán propuestas de restricciones migratorias severas, incluso “si solo el AfD apoya nuestras propuestas”. Friedrich Merz, líder de la CDU, subrayó que las iniciativas se introducirán en el Bundestag (Parlamento alemán) independientemente de quién las respalde, reafirmando así el compromiso del partido con sus convicciones.
Un cambio en la percepción sobre la inmigración
La postura de la CDU se produce en un contexto en el que las actitudes hacia la inmigración en Alemania se han endurecido desde que la ex canciller Angela Merkel abrió las fronteras del país a más de un millón de migrantes en 2015. Actualmente, el AfD se ha convertido en el segundo partido más popular del país, con un 20% de intención de voto, solo por detrás de la CDU, que alcanza el 30%, y por delante de los Socialdemócratas (SPD) del canciller Olaf Scholz, que se sitúan en un 17% según encuestas recientes.
Merz es considerado un candidato probable para asumir la cancillería tras las elecciones generales que se celebrarán el próximo mes. La inmigración se ha convertido en la principal preocupación de los votantes, un tema que ha cobrado mayor relevancia tras un trágico incidente en una escuela de Baviera, donde un hombre afgano fue acusado de apuñalar a un niño de dos años. Ante esta situación, la líder del AfD, Alice Weidel, ha ofrecido su apoyo a Merz para cualquier restricción migratoria que proponga su partido.
Weidel celebró la decisión de la CDU en un mensaje en la red social X, afirmando que “el muro ha caído” y que la CDU y su partido hermano, la CSU, han aceptado su oferta de votar juntos en el Bundestag sobre el crucial tema de la migración. Esta colaboración, según Weidel, representa una buena noticia para el país.
