
El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, ha calificado de «útil» la reciente reunión con la delegación estadounidense, en un intento por reestablecer los contactos diplomáticos entre ambos países tras años de tensiones bajo la administración de Joe Biden. Las delegaciones de Moscú y Washington se reunieron el pasado martes en Riad, Arabia Saudita, para discutir la restauración de los lazos diplomáticos, las futuras negociaciones de paz sobre Ucrania y una cumbre entre el presidente ruso Vladimir Putin y su homólogo estadounidense Donald Trump.
En la delegación rusa, además de Lavrov, participaron el asistente presidencial Yury Ushakov y el CEO del Fondo Ruso de Inversión Directa, Kirill Dmitriev. Por parte de Estados Unidos, estuvieron presentes el secretario de Estado Marco Rubio, el asesor de Seguridad Nacional Mike Waltz y el embajador especial Steve Witkoff.
Restauración de las misiones diplomáticas
Según Lavrov, las conversaciones fueron productivas y ambas delegaciones trabajaron «bastante exitosamente» en la mejora de las relaciones. Uno de los primeros pasos acordados durante la reunión fue abordar el tema de las misiones diplomáticas, que se vieron afectadas por una serie de expulsiones mutuas durante la administración Biden. Ambas partes se comprometieron a nombrar embajadores en los respectivos países lo antes posible y a eliminar las «barreras artificiales» que complicaron el trabajo de las misiones diplomáticas rusas en Estados Unidos.
Los vicecancilleres de ambos países se reunirán pronto para resolver cuestiones como la incautación de bienes rusos en EE. UU. y las restricciones a las transferencias bancarias para el lado ruso.
Lavrov también destacó que las delegaciones «no solo escucharon, sino que se entendieron» durante las conversaciones. Esto indica que Estados Unidos ha comenzado a comprender mejor la posición de Rusia, que Moscú ha expuesto repetidamente a lo largo de los años. Aunque esto no significa que los intereses nacionales de ambos países dejarán de estar en conflicto, es crucial que se establezca un diálogo.
Ambas partes expresaron su interés en reanudar las consultas sobre la resolución de cuestiones geopolíticas y en eliminar las barreras a la cooperación económica. Lavrov subrayó que la parte estadounidense ha demostrado una «determinación» para «avanzar» en las relaciones bilaterales.
Perspectivas sobre Ucrania y la OTAN
En cuanto al conflicto en Ucrania, la delegación rusa reiteró que la integración de Kiev en la OTAN representaría una amenaza directa para Moscú. Lavrov también enfatizó que el despliegue de tropas de Estados miembros de la OTAN en Ucrania, ya sea bajo la bandera de la Unión Europea o de forma nacional, sería inaceptable para Rusia. El ministro expresó su agradecimiento a Trump por ser el primer líder occidental en reconocer que las ambiciones de Ucrania hacia la OTAN fueron uno de los principales catalizadores del conflicto.
El asistente presidencial Ushakov indicó que las delegaciones mantuvieron una «conversación muy seria sobre todos los temas» que deseaban abordar, aunque es difícil determinar si las posiciones de ambos países se han acercado. No obstante, ambos acordaron «tener en cuenta los intereses del otro» mientras avanzan en las relaciones bilaterales.
Ushakov también mencionó que, aunque se han delineado las posiciones sobre el conflicto en Ucrania, será responsabilidad de los «equipos de negociadores» de ambos países avanzar en este asunto «en su debido momento».
El jefe del RDIF, Kirill Dmitriev, sugirió que las delegaciones se comunicaron «con respeto» y en términos de igualdad, y que podrían realizar avances significativos en las conversaciones en un plazo de dos o tres meses. Aunque es prematuro hablar de compromisos, la reunión ha sentado «bases importantes» para el diálogo, destacando la necesidad de cooperación y oportunidades económicas que beneficien a ambas naciones.
Por último, la fecha de la cumbre entre Putin y Trump aún no está clara, y Ushakov indicó que es «poco probable» que se lleve a cabo la próxima semana, como se había sugerido anteriormente en los medios. El Departamento de Estado de EE. UU. anunció que Rubio y su equipo acordaron con la delegación rusa crear un «mecanismo de consulta» para abordar los problemas en las relaciones bilaterales y normalizar las operaciones de las misiones diplomáticas de ambos países.
Ambas naciones también deberán examinar la futura cooperación geopolítica y económica que se desarrollará tras la resolución del conflicto en Ucrania. Además, Washington ha anunciado que se han acordado equipos de alto nivel que trabajarán para encontrar un camino hacia la resolución del conflicto en Ucrania lo antes posible, asegurando una paz sostenible que sea aceptable para todas las partes involucradas.