El Banco Santander ha anunciado que 750 de sus empleados en el Reino Unido se encuentran en riesgo de despido debido al cierre de 95 sucursales en el país. Esta decisión forma parte de una estrategia más amplia para actualizar su presencia en el mercado británico, que se prevé a partir de junio de 2025. Tras estos cambios, la red de Santander en el Reino Unido se reducirá a 349 sucursales, de las cuales 290 serán de servicio completo, 36 funcionarán con horarios reducidos, y 18 serán sin mostrador, además de cinco Work Cafes.
Un portavoz de Santander UK ha declarado que «cerrar una sucursal siempre es una decisión muy difícil» y que se ha dedicado un considerable esfuerzo a evaluar el momento y el lugar de estos cierres, buscando minimizar el impacto en sus clientes. Este movimiento se enmarca en un contexto donde se ha observado un cambio acelerado hacia la digitalización de los servicios bancarios, con un aumento del 63% en las transacciones digitales y una disminución del 61% en las gestiones realizadas en sucursales físicas desde 2019.
Perspectivas sobre el futuro de Santander en el Reino Unido
El futuro de la presencia internacional de Santander ha suscitado interrogantes, especialmente tras dos décadas desde la adquisición de Abbey National, que llevó al banco a una posición prominente en el mercado británico. A principios de año, el Financial Times insinuó que el banco podría estar considerando una salida de sus operaciones en el Reino Unido, afirmación que ha sido desmentida repetidamente por Ana Botín, presidenta ejecutiva de Santander.
Un portavoz de la entidad ha reiterado que «el Reino Unido es un mercado clave para Santander y esto no ha cambiado». No obstante, la situación laboral en el Reino Unido se presenta complicada, con pronósticos de más de 1,400 despidos en el sector británico de Santander, aunque sin un calendario específico para la implementación de estos recortes. Además, el banco ha tenido que reservar 295 millones de libras (382.7 millones de dólares) en noviembre para cubrir posibles compensaciones relacionadas con una investigación de la industria sobre comisiones de financiación de automóviles.
A pesar de estos desafíos, el Banco Santander ha reportado un récord de beneficios en el cuarto trimestre, con un incremento del 11% respecto al año anterior, alcanzando los 3.265 millones de euros (3.56 mil millones de dólares). En este contexto, el banco también ha anunciado planes para recomprar acciones por un total de 10 mil millones de euros (10.89 mil millones de dólares) entre 2025 y 2026, lo que denota una posición financiera robusta que contrasta con las tensiones en su red de sucursales en el Reino Unido.
