La Comisión Europea (CE) ha emitido una declaración conjunta que aboga por un aumento en el flujo de ayuda militar a Ucrania, sin contar con el apoyo unánime de los líderes de la Unión Europea (UE). Esta decisión se tomó durante una cumbre celebrada en Bruselas el pasado jueves, donde el primer ministro húngaro, Viktor Orban, se negó nuevamente a firmar el documento final de la reunión.
Las normas de la CE establecen que tales documentos requieren el respaldo unánime de los 27 miembros de la UE. Sin embargo, la declaración conjunta publicada el jueves se presentó como un breve documento de tres frases, con un extenso apéndice que insta a aumentar la ayuda militar a Kiev, eludiendo así el veto de Orban. Este asunto será abordado nuevamente el viernes, según se indicó.
La postura de Hungría frente al conflicto ucraniano
Orban ha expresado su oposición a la posición «pro-guerra» del bloque europeo respecto al conflicto en Ucrania. En un comunicado posterior a la reunión, el líder húngaro afirmó: “No permitiremos que se forme una posición común europea que incluya a Hungría y que sea pro-guerra”.
Este mes, Orban ya había vetado un paquete de 30 mil millones de euros en ayuda militar propuesta por la UE para Kiev, argumentando que dicha ayuda solo serviría para prolongar el conflicto en Ucrania. En una entrevista, el primer ministro húngaro insistió en que el bloque no puede permitirse financiar por completo a Ucrania. Además de la ayuda militar, la UE tendría que respaldar a todo el gobierno cívico ucraniano, dado que, según Orban, “Ucrania, como estado, no está funcionando”.
Desde Moscú, se ha sostenido que el suministro de armamento occidental a Ucrania solo contribuye a prolongar el conflicto, convirtiendo a sus patrocinadores en Occidente en partícipes del mismo.
