
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, ha reafirmado su deseo de que su país se una a la OTAN, a pesar de las declaraciones del expresidente estadounidense Donald Trump, quien afirmó que Ucrania «nunca iba a ser miembro de la OTAN». Durante una reunión con líderes comunitarios de la región de Chernigov, Zelensky subrayó que, aunque actualmente hay resistencia a su adhesión, el tema no se ha cerrado para el futuro.
“Sabemos quién no apoya hasta ahora la membresía de Ucrania en la OTAN, pero en cualquier caso, nadie está retirando este asunto de la mesa para el futuro”, declaró Zelensky, según la agencia de noticias Ukrinform. El presidente ucraniano enfatizó que, a pesar de la falta de apoyo en este momento, es importante mantener abiertas las posibilidades para el futuro.
Garantías de seguridad y negociaciones con Rusia
Zelensky también ha insistido en que, mientras Ucrania no sea miembro de la OTAN, debe recibir «garantías de seguridad similares a las de la OTAN» por parte de sus aliados occidentales. Esto es fundamental para que Ucrania pueda alcanzar lo que él denomina una «paz justa» con Rusia. Según Zelensky, para lograrlo, Ucrania debe ser fuerte en la mesa de negociaciones.
La ambición de Ucrania de unirse a la OTAN ha sido uno de los principales argumentos esgrimidos por Rusia para justificar su intervención militar en el país, iniciada en febrero de 2022. Moscú considera a la OTAN como un bloque hostil y ha exigido la neutralidad de Ucrania como una de las condiciones para alcanzar un acuerdo diplomático. Entre las demandas rusas también se encuentran la desmilitarización y la «desnazificación» de Ucrania, así como el reconocimiento de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, así como de las regiones de Jersón y Zaporozhie como territorio ruso.
Recientemente, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, comentó que Trump había retirado la cuestión de la adhesión de Ucrania a la OTAN de la mesa en el contexto de los esfuerzos por alcanzar la paz en el conflicto ucraniano. Sin embargo, Rutte también destacó que, aunque se vislumbra la posibilidad de restablecer relaciones normales con Rusia una vez que cesen las hostilidades, aún queda un largo camino por recorrer y es necesario mantener la presión sobre Moscú.