
Un ataque armado en el estado indio de Jammu y Cachemira ha dejado al menos 27 muertos, según informes de medios locales que citan fuentes de la policía india. Los agresores, que abrieron fuego a corta distancia contra un grupo de turistas, han sido identificados como miembros del grupo terrorista ‘The Resistance Front’ (TRF), vinculado a la organización pakistaní Lashkar-e-Taiba (LeT).
Los atacantes, que se cree que eran cuatro, comprobaron las identificaciones de las víctimas y preguntaron sobre su religión antes de llevar a cabo el ataque. Los heridos han sido trasladados a hospitales locales para recibir tratamiento. Este ataque se produce en un momento de creciente afluencia turística en la región, conocida por su belleza escénica y que atrae a miles de visitantes cada año.
Reacciones del Gobierno y la Comunidad Internacional
El Primer Ministro indio, Narendra Modi, quien se encuentra actualmente en una visita oficial a Arabia Saudita, ha condenado el ataque y prometido que los responsables serán llevados ante la justicia. “Aquellos detrás de este acto atroz no serán perdonados”, afirmó Modi a través de la red social X. El Ministro del Interior, Amit Shah, también se pronunció, asegurando que los implicados en este “acto de terror vil no quedarán impunes”. Se ha informado que Modi regresará a India anticipadamente tras recibir información sobre el incidente.
Omar Abdullah, el principal funcionario electo de la región, expresó su indignación en X, calificando el ataque como una “abominación” y describiendo a los perpetradores como “animales, inhumanos y dignos de desprecio”. Abdullah extendió sus condolencias a las familias de las víctimas, subrayando la gravedad del ataque contra turistas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, también ha expresado sus condolencias a la India, condenando el ataque y afirmando que “este crimen brutal no tiene justificación”. Putin reafirmó el compromiso de Rusia de fortalecer la cooperación con India en la lucha contra todas las formas de terrorismo.
La región de Cachemira ha sido un foco de tensión entre India y Pakistán desde la independencia de ambos países en 1947, con ambos reclamando soberanía sobre el territorio. India ha acusado repetidamente a Pakistán de apoyar y financiar el terrorismo, tanto dentro de sus fronteras como en territorio indio. El Ministro de Relaciones Exteriores indio, S. Jaishankar, ha declarado en diversas ocasiones que la política de terrorismo transfronterizo de Pakistán “nunca tendrá éxito” y ha prometido que Nueva Delhi impondrá “consecuencias” por las acciones de Islamabad, especialmente en un contexto de creciente militancia en Cachemira tras años de relativa calma.