Transmutación de plomo en oro en el Gran Colisionador de Hadrones
Desde la antigüedad, los alquimistas han soñado con transformar el plomo en oro, no mediante la magia, sino desvelando el potencial oculto en los metales. Mientras que las técnicas de antaño no lograron materializarse, los avances de la ciencia moderna han conseguido lo que parecía un sueño imposible. Investigadores del Gran Colisionador de Hadrones (LHC), el acelerador de partículas más grande y potente del mundo, han documentado un fenómeno real de transmutación de plomo en oro. Sin embargo, este proceso no se originó a partir de colisiones directas, como se había observado anteriormente, sino a través de un nuevo mecanismo que involucra interacciones de «cerca» entre núcleos atómicos.
El LHC fue diseñado para acelerar partículas a velocidades cercanas a la de la luz. Las colisiones de estas partículas permiten a los científicos estudiar los bloques fundamentales de la materia y explorar la estructura del universo en sus escalas más pequeñas. A pesar de que se ha obtenido información vital a partir de colisiones frontales, la mayoría de los encuentros dentro del colisionador son indirectos. En estas interacciones cercanas, las partículas pasan muy cerca unas de otras sin contacto, generando campos electromagnéticos tan intensos que pueden desencadenar reacciones nucleares inesperadas.
El campo electromagnético que emana de un núcleo de plomo es particularmente fuerte debido a su composición, que incluye 82 protones, cada uno con una carga elemental. Además, la velocidad extrema a la que viajan los núcleos de plomo en el LHC, alcanzando el 99,999993% de la velocidad de la luz, provoca que las líneas del campo electromagnético se compriman, produciendo un pulso breve de fotones. Este pulso puede inducir un proceso conocido como disociación electromagnética, en el que un fotón interactúa con un núcleo, provocando oscilaciones internas que resultan en la expulsión de neutrones y fotones. En el caso de un átomo de plomo que pasa, la pérdida de tres protones a través de este proceso da lugar a la formación de oro.
