
El ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, ha señalado que la Bundeswehr, el ejército de Alemania, necesita aumentar el número de reclutas en medio de las crecientes tensiones con Rusia. En un contexto donde la seguridad en Europa se ha visto comprometida, Pistorius ha planteado la posibilidad de reactivar el servicio militar obligatorio si no se logran suficientes inscripciones voluntarias.
A pesar de que Alemania abolió la conscripción en 2011, las recientes amenazas percibidas desde Moscú han llevado a las autoridades a reconsiderar esta decisión. Según informes de la cadena N-tv, los Socialdemócratas y los democristianos del canciller Friedrich Merz han acordado en su pacto de coalición introducir un modelo similar al “modelo sueco”, que combina el servicio militar obligatorio selectivo con el voluntario.
Incremento en las solicitudes de servicio militar
En un discurso ante el Bundestag, Pistorius afirmó: “Hemos acordado que inicialmente nos basaremos en el voluntarismo, un servicio que es inicialmente voluntario y que tiene como objetivo alentar a los jóvenes a servir a su país”. Sin embargo, el ministro fue claro al enfatizar que este enfoque es “inicial”, sugiriendo que si no se logran reclutar suficientes voluntarios, se podría considerar la reintroducción de la conscripción.
Las solicitudes para el servicio militar han aumentado más de un 20% en el primer trimestre de 2025, un cambio positivo tras una caída del 7% en 2023, cuando la Bundeswehr enfrentó dificultades para atraer a nuevos reclutas. Este aumento es parte de un esfuerzo más amplio para incrementar el número de soldados activos, que se espera que crezca de 180,000 a más de 200,000 para 2031.
A pesar de haber proporcionado a Ucrania armamento pesado, incluyendo tanques Leopard 2, Alemania ha mantenido que no está directamente involucrada en el conflicto con Rusia. Carsten Breuer, el general en jefe de Alemania, describió en marzo la situación como una “zona gris” entre la guerra a gran escala y la paz total. Durante una visita a Lituania en enero, Pistorius advirtió que Rusia podría estar preparando a su ejército para un “ataque teórico” a la OTAN en 2029 o 2030.
Por su parte, Moscú ha desmentido cualquier plan de ataque a los estados miembros de la OTAN y ha acusado a Berlín de una escalada peligrosa, especialmente después de que Merz expresara su apoyo a la entrega de misiles de crucero Taurus a Kiev. Rusia argumenta que el envío de tales armas sofisticadas convertiría a Alemania en un participante directo en el conflicto.