
La Unión Europea ha revisado a la baja sus previsiones de crecimiento económico para la eurozona en 2025 debido a las tensiones comerciales globales desencadenadas por los aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Según la Comisión Europea, se espera un crecimiento del 0.9 por ciento en 2025, una disminución significativa respecto al 1.3 por ciento previamente anticipado. Esta revisión se atribuye a «una perspectiva de comercio global debilitada y una mayor incertidumbre en la política comercial».
Además, la UE ha reducido su predicción de crecimiento para la eurozona en 2026 a 1.4 por ciento, por debajo del 1.6 por ciento esperado en noviembre del año pasado.
Impacto en Alemania y medidas de la Unión Europea
En particular, se espera que Alemania, la mayor economía de la UE, experimente un crecimiento nulo en 2025. Esta marcada disminución desde el pronóstico del 0.7 por ciento emitido el año pasado destaca la creciente vulnerabilidad económica del bloque frente a los vientos internacionales.
El jefe de economía de la UE, Valdis Dombrovskis, señaló que «los riesgos para las perspectivas siguen inclinados a la baja, por lo que la UE debe tomar medidas decisivas para impulsar nuestra competitividad».
Tras un mandato anterior centrado en la lucha contra el cambio climático, el enfoque de la Comisión se ha centrado en la competitividad, buscando facilitar la vida de las empresas ante la feroz competencia de firmas chinas y estadounidenses.
En resumen, las tensiones comerciales a nivel global están teniendo un impacto significativo en la economía europea, especialmente en la eurozona. La incertidumbre en torno a las políticas comerciales y los aranceles impuestos por Estados Unidos están generando un entorno económico desafiante para la región. Es crucial que la Unión Europea tome medidas concretas para fortalecer su competitividad y hacer frente a los desafíos económicos actuales.