Los ambientadores profesionales, como los que nos ofrece Centhylon, se usan cada vez más, ya que han dejado de ser exclusivos de las grandes corporaciones (como ocurría hasta hace unos años). Ahora, ya es normal que se empleen en hoteles, comercios pequeños o centros sanitarios. De hecho, los aromas se están convirtiendo en parte de la identidad corporativa, al igual que pasa con los colores, las letras, etc.
Dentro del mundo profesional se emplean sistemas de ambientación avanzados
Si echamos un vistazo a los ambientadores que hay en el sector profesional, nos damos cuenta de que tienen muy poco que ver con aquellos que se han estado usando durante décadas. De hecho, se emplean tecnologías como la difusión por micropartículas o la nebulización en frío.
Además, para la propagación ya se opta por sistemas programables que se manejan desde aplicaciones instaladas en los smartphones. Así, esto permite tener un control total del ambientador, cambiando la temporización, la distribución del aroma, la intensidad, etc.
Aquellos equipos más avanzados, ya se conectan con los sistemas de climatización. Con eso, se asegura un suministro homogéneo por todo el espacio del local.
Impacto del aroma controlado en los clientes
Ya hay estudios, hechos por especialistas en marketing, que indican que cuando los locales tienen una buena ambientación olfativa (un olor agradable), los clientes llegan a permanecer mucho más tiempo dentro, lo que supone un incremento de las ventas.
Este aroma, además de ser agradable, se tiene que diseñar con el fin de que sea coherente con la marca y con el entorno en el que se está. Por ejemplo, en los centros médicos se opta por aquellos aromas que se sabe que nos calman, mientras que en esas tiendas de ropa juvenil con música a todo volumen, siempre se escogen fragancias que aportan energía.
El sector se preocupa por el medioambiente y la salud
Tal y como ocurre en otros sectores, el de los ambientadores profesionales no es ajeno a la preocupación creciente por el medioambiente y por la salud. Por eso, cada vez son más las formulaciones biodegradables, que además ya vienen sin compuestos orgánicos volátiles.
Estos son malos para nuestra salud, tanto que hay límites a la hora de emplear algunos compuestos que se venían utilizando de forma tradicional en los ambientadores.
Las empresas optan por personalizar aromas
Al igual que las marcas trabajan con el fin de lograr una identidad corporativa reconocida, ahora hacen lo propio con los ambientadores. De hecho, ya se está desarrollando lo que se conoce como “logo olfativo”, que no es más que una fragancia única que los clientes identifican con esa marca.
Cada sitio tiene su olor o aroma más adecuado. Así, en los espacios corporativos se suelen escoger tonos cítricos y de madera, mientras que el sector hostelero se decanta por las fragancias florales.
Nuevas aplicaciones para estos ambientadores
Como es de esperar, los fabricantes de ambientadores profesionales no paran de investigar. De esa manera, ya saben que hay aromas que mejoran la concentración en los centros educativos y otros que neutralizan los olores característicos de las fábricas.
También se trabaja con la IA, para que esta ajuste los aromas dependiendo de variables como la temperatura del local o cuánta gente hay dentro.
