La compañía United Airlines ha alcanzado un acuerdo tentativo con la Asociación de Auxiliares de Vuelo-CWA para sus 28,000 asistentes de vuelo, según informó el sindicato el pasado viernes. Este acuerdo, que se describe como «líder en la industria», incluye mejoras económicas significativas para los trabajadores, quienes no han recibido un aumento salarial desde 2020.
Entre los beneficios acordados se destacan un 40% de mejoras económicas en el primer año, así como pagos retroactivos y un bono por firma. Adicionalmente, se han negociado mejoras en la calidad de vida, que abarcan cuestiones como una mejor programación y tiempos de disponibilidad. Este avance se produce en un contexto en el que los asistentes de vuelo habían autorizado previamente una huelga si no se lograba un acuerdo satisfactorio.
Contexto de la negociación laboral
La presión por aumentar los salarios ha sido constante en el sector de la aviación estadounidense, especialmente después de que otros grupos laborales, como los pilotos, lograran acuerdos favorables tras la pandemia. United Airlines, que ha sido una de las últimas grandes aerolíneas en cerrar un acuerdo con su personal de cabina, se enfrenta ahora a la votación del sindicato para ratificar el pacto, así como a la finalización del lenguaje contractual en los próximos días.
Este tipo de negociaciones pone de manifiesto la importancia de la organización y la capacidad de los trabajadores para defender sus derechos en un entorno económico desafiante. Los sindicatos han desempeñado un papel crucial en la búsqueda de mejores condiciones laborales, algo que es fundamental en cualquier sociedad que aspire a garantizar el bienestar de sus ciudadanos.
