SpaceX vuelve a intentarlo con el lanzamiento del Starship tras fallos anteriores
El pasado martes, SpaceX reanudó los lanzamientos de su mega cohete Starship después de dos explosiones consecutivas que habían frustrado sus intentos anteriores. Este noveno vuelo de prueba despegó desde Starbase, el sitio de lanzamiento de la compañía en el extremo sur de Texas. Recientemente, los residentes de la zona votaron para constituirla como una ciudad oficial, lo que añade un matiz local al ambicioso proyecto de la empresa.
El plan de esta misión contemplaba un aterrizaje en el océano Índico, a medio camino alrededor del mundo, tras la liberación de ocho objetos diseñados para simular los satélites de internet Starlink de SpaceX. Sin embargo, el ejercicio no pudo llevarse a cabo debido a un fallo en la apertura total de la puerta, lo que impidió que se liberaran los satélites. Este lanzamiento marcó un hito, ya que fue la primera vez que uno de los Starship de Elon Musk voló con un cohete impulsor reciclado, aunque a diferencia de pruebas anteriores, no se intentó recuperar el impulsor, que se estrelló en el Golfo de México.
A pesar de que los dos lanzamientos anteriores no lograron avanzar más allá del Caribe, este último intento se llevó a cabo con la autorización de la Administración Federal de Aviación (FAA), que amplió el área de peligro y ajustó el horario de lanzamiento para evitar la congestión del tráfico aéreo. SpaceX ha realizado modificaciones en las baldosas térmicas del cohete y ha instalado nuevos dispositivos de captura, con el objetivo de probar estas mejoras para futuros lanzamientos. La NASA espera que SpaceX logre avances significativos en el desarrollo del Starship en el próximo año, ya que esta nave es crucial para el regreso de astronautas a la Luna, con un primer vuelo no tripulado previsto para 2024.
