105 views 7 mins 0 comments

El dramático aumento de los desplazamientos por el cambio climático en Canadá

In Sin categoría
junio 09, 2025

La temporada de incendios forestales ha comenzado y los efectos destructivos del cambio climático se sienten con fuerza en Canadá. Varias comunidades en el norte de Saskatchewan han recibido órdenes de evacuación debido a los incendios, mientras que la Nación Cree Pimicikamak en Manitoba ha trabajado para evacuar a cientos de personas a medida que el fuego se acercaba. La situación se agrava con problemas de calidad del aire que afectan a todo el país debido al humo de estos incendios.

No son solo los incendios los que amenazan hogares y medios de vida. En mayo, 1,600 residentes de la Nación Cree Kashechewan, en el norte de Ontario, se vieron obligados a evacuar nuevamente debido a las inundaciones del río Albany, un fenómeno que ocurre casi todos los años.

Según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2018, se instó a todos los Estados a adoptar «leyes, políticas y estrategias» destinadas a «evitar, minimizar y abordar el desplazamiento relacionado con los efectos adversos del cambio climático». Las cifras son alarmantes: para 2050, más de 140 millones de personas podrían convertirse en migrantes climáticos internos en África subsahariana, Asia del Sur y América Latina, especialmente si las acciones para alcanzar emisiones netas de carbono cero no son suficientes.

La migración climática en Canadá

El cambio climático no ha perdonado a Canadá, donde 192,000 personas fueron evacuadas en 2023 debido a desastres agravados por este fenómeno, incluyendo inundaciones e incendios. A medida que el cambio climático provoca fenómenos meteorológicos más extremos, el desplazamiento climático temporal podría transformarse en una migración permanente.

La migración climática interna se define, según el Banco Mundial, como la necesidad de reubicarse durante al menos una década a una distancia de 14 kilómetros o más de la comunidad de origen debido a los impactos climáticos. Un análisis presentado en la Conferencia de 2025 de la Asociación Canadiense para el Estudio de Refugiados y Migración Forzada revela que el gobierno canadiense ha subestimado la realidad de esta migración interna en sus informes bajo el Acuerdo de París, lo que oscurece la gravedad del fenómeno.

Uno de estos informes, la Contribución Nacional Determinada (NDC), reconoce que el cambio climático afecta a ciertas poblaciones más que a otras, pero no aborda el desplazamiento temporal, ni mucho menos la migración climática interna. Por ejemplo, los incendios de Fort McMurray en 2016 desplazaron a más de 80,000 personas, y las inundaciones de primavera en Quebec en 2019 afectaron a más de 10,000 personas. En Sainte-Marie, muchas familias de bajos ingresos abandonaron la ciudad porque no podían costear las viviendas reconstruidas.

Es necesario contar con una definición clara de migrantes climáticos internos en Canadá, así como datos robustos y una mejor coordinación entre los gobiernos indígenas, municipales, provinciales y federales. Una Ley Nacional de Adaptación podría proporcionar un marco integral para fortalecer la acción de adaptación en todo el país.

En 2024, Canadá presentó una comunicación de adaptación que menciona los impactos climáticos, pero tan solo alude al desplazamiento interno una vez. No se incluyen datos o discusiones sobre cuándo el desplazamiento se convierte en permanente, ni se centra en el impacto desproporcionado en grupos que merecen atención. En el informe NDC actualizado de este año, se menciona brevemente la adaptación, pero se refiere principalmente a la Estrategia Nacional de Adaptación de 2023. Las únicas referencias al desplazamiento provienen de aportes de los Pueblos Indígenas.

Los Pueblos Indígenas enfrentan políticas de adaptación defectuosas y barreras institucionales que les impiden responder eficazmente a las emergencias. Como resultado, las Primeras Naciones son evacuadas 328 veces más frecuentemente que las comunidades no indígenas durante desastres climáticos. Por ejemplo, en 2011, las autoridades de Manitoba desviaron las aguas de inundación hacia el lago St. Martin para proteger propiedades urbanas, cottage y agrícolas, inundando a 17 Primeras Naciones y desplazando a 4,525 personas.

Para abordar este problema, Canadá debería adoptar una definición clara de migrantes climáticos internos que capte el desplazamiento derivado de desastres climáticos y fenómenos de lento aumento como el aumento del nivel del mar y la pérdida de biodiversidad. Expertos de la ONU han instado a la creación de una base de datos sólida sobre los patrones, tendencias y resultados de la movilidad inducida por el clima, así como a la necesidad de esfuerzos de adaptación informados por consultas con las partes interesadas y prácticas de adaptación existentes.

El gobierno canadiense debería trabajar con todos los actores para adoptar una Ley Nacional de Adaptación, similar a las implementadas en Brasil, Alemania y Japón. Tal legislación podría eliminar las barreras a la acción de adaptación indígena, coordinar esfuerzos entre los diferentes órdenes de gobierno para prevenir desplazamientos, definir la migración climática interna, asegurar la recolección de datos y proteger los derechos de las personas desplazadas temporalmente o que migran internamente debido al cambio climático.

Se requiere una mayor transparencia y responsabilidad, ya que lo que Canadá ha logrado hasta ahora con sus informes del Acuerdo de París es insuficiente.

/ Published posts: 17097

Diario obrero y republicano fundado el 14 de Abril de 2006.