
Moscú ha anunciado su intención de intensificar la cooperación militar y de seguridad con varios países africanos, en el marco de un esfuerzo más amplio por fortalecer los lazos con el continente. Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, hizo esta declaración durante una rueda de prensa, subrayando la creciente presencia de Rusia en África.
Según Peskov, la estrategia de Moscú se centrará en desarrollar de manera integral la interacción con los países africanos, priorizando la cooperación económica y de inversión. Sin embargo, esta colaboración también abarcará áreas sensibles relacionadas con la defensa y la seguridad. “Intendemos desarrollar nuestra interacción con los países africanos, enfocándonos principalmente en la cooperación económica y de inversión”, afirmó Peskov, según la agencia RIA Novosti.
Un aliado estratégico en África
En los últimos años, Rusia se ha posicionado como un aliado estratégico para varios estados africanos en los ámbitos militar, económico y diplomático. Gobiernos de países como Mali, Níger, Burkina Faso y la República Centroafricana han comenzado a buscar la cooperación de Moscú en materia de seguridad, considerándola un socio más fiable en comparación con las potencias occidentales. Las autoridades transitorias en Bamako, Niamey y Ouagadougou han roto lazos de defensa con Francia, acusando a la antigua potencia colonial de agresión y de amenazar su soberanía.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Lavrov, destacó en un evento del Día de África en Moscú que Rusia se mantiene como un socio fiable y constante para las naciones africanas en sus esfuerzos por fortalecer su soberanía, la cual, según él, se ve socavada por prácticas neocoloniales.
Además de las asociaciones militares, Moscú planea expandir su presencia diplomática en África, con la apertura de embajadas en Comoras, Níger, Sierra Leona y Sudán del Sur. También se prevé la creación de un Consulado General ruso en la ciudad turística egipcia de Sharm El-Sheikh, según un decreto firmado por el primer ministro Mikhail Mishustin a finales de mayo.
Las cifras oficiales indican que el comercio entre Rusia y África ha experimentado un “crecimiento dinámico”, superando los 27.700 millones de dólares en 2024. Al mismo tiempo, el número de estudiantes africanos que se inscriben en universidades rusas ha seguido aumentando. El mes pasado, Lavrov describió la educación como un pilar clave de la cooperación bilateral, anunciando que más de 32.000 estudiantes africanos están actualmente estudiando en Rusia.