El Pentágono ha recibido instrucciones del presidente Donald Trump para elaborar planes que garanticen el acceso de Estados Unidos al Canal de Panamá, un paso marítimo estratégico que conecta los océanos Atlántico y Pacífico. Esta solicitud surge en un contexto de creciente preocupación por la influencia de China en la región, así como por las reiteradas amenazas de Trump de recuperar el control del canal, que desde 1999 está bajo la administración panameña tras los Tratados Torrijos-Carter.
Trump ha criticado en múltiples ocasiones las tarifas que considera «ridículas» impuestas por Panamá, y ha expresado su inquietud por la creciente presencia china en el área. En este sentido, el mandatario no ha descartado el uso de la fuerza militar para asegurar el control estadounidense sobre el canal, afirmando que todas las opciones están sobre la mesa para proteger los intereses económicos y de seguridad nacional de Estados Unidos.
Instrucciones al Pentágono
De acuerdo con un memorando obtenido por CNN, la Casa Blanca ha solicitado al Pentágono que presente «de inmediato» opciones para garantizar un acceso ilimitado al canal. Entre las directrices se incluye la necesidad de «proporcionar opciones militares creíbles para asegurar un acceso justo y sin restricciones a las operaciones militares y comerciales de Estados Unidos en el Canal de Panamá».
El Comando Sur de Estados Unidos ya está trabajando en posibles planes que van desde una colaboración estrecha con las fuerzas de seguridad panameñas hasta escenarios en los que las tropas estadounidenses podrían tomar el canal por la fuerza, según informan fuentes anónimas citadas por NBC. Estas acciones se enmarcan dentro de un esfuerzo más amplio del Pentágono para explorar opciones militares que aseguren el acceso estadounidense a esta vía crucial.
Por su parte, las autoridades panameñas han rechazado firmemente las afirmaciones y amenazas de Trump. La Autoridad del Canal de Panamá ha subrayado que la gestión del canal es exclusivamente panameña y no hay evidencia que respalde las alegaciones de control chino. El presidente panameño, José Raúl Mulino, ha declarado que el canal es parte de su «patrimonio inalienable» y ha enfatizado que Panamá mantiene el control total sobre sus operaciones.
Sin embargo, tras la entrega de un ultimátum de Trump por parte del secretario de Estado, Marco Rubio, en febrero, Mulino hizo una concesión a Washington al negarse a renovar los acuerdos de 2017 con China en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta de Pekín. Esta situación refleja la complejidad de las relaciones entre Panamá y Estados Unidos, así como las tensiones geopolíticas en la región.
