
Los ciclones tropicales son huracanes que se forman sobre el océano tropical y pueden desplazarse sobre tierra, inundando regiones costeras. Los ciclones más extremos pueden generar marejadas devastadoras, que son aguas marinas elevadas por las mareas y las olas, causando eventos de inundación catastróficos en las zonas costeras. Un nuevo estudio realizado por científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) ha descubierto que, a medida que el planeta se calienta, la recurrencia de marejadas destructivas aumentará diez veces para una de las regiones más afectadas del mundo: Bangladés.
En un estudio publicado en la revista One Earth, los científicos informan que en este país costero de alta densidad poblacional, lo que antes era un evento de 100 años podría ocurrir ahora cada diez años, o incluso con mayor frecuencia, para finales de siglo. En un futuro donde los combustibles fósiles continúen quemándose como hasta ahora, lo que solía considerarse una marejada catastrófica, que se producía una vez cada siglo, afectará a Bangladés, en promedio, una vez por década. Asimismo, las marejadas que anteriormente ocurrían cada diez años probablemente azotarán la costa del país con más frecuencia, cada pocos años.
La vulnerabilidad de Bangladés
Bangladés es uno de los países más densamente poblados del mundo, con más de 171 millones de personas viviendo en una región aproximadamente del tamaño del estado de Nueva York. Históricamente, el país ha sido vulnerable a los ciclones tropicales, debido a su delta de baja altitud que se inunda fácilmente durante las tormentas y a su temporada de monzones. Algunas de las inundaciones más destructivas del mundo han ocurrido en Bangladés, donde se ha vuelto cada vez más difícil para las economías agrícolas recuperarse.
El estudio también revela que es probable que Bangladés experimente ciclones tropicales que se superpongan con la temporada de monzones, que hasta ahora ocurrían en momentos separados del año. Pero a medida que aumenta la temperatura del planeta, los modelos de los científicos indican que los ciclones se desplazarán hacia la temporada de monzones, causando eventos de inundación consecutivos en todo el país.
Los esfuerzos de Bangladés para prepararse ante los peligros climáticos son significativos. Se han realizado inversiones en la mejora del sistema de alerta temprana, el refuerzo de embankments en las aldeas y el aumento del acceso a refugios comunitarios. Sin embargo, estas preparaciones se han basado en la frecuencia actual de las tormentas.
La investigación del MIT busca proporcionar proyecciones detalladas de los peligros de las marejadas extremas en Bangladés bajo varios escenarios de calentamiento climático y proyecciones de aumento del nivel del mar. Este marco permite a los científicos simular decenas de miles de ciclones tropicales potenciales cerca de Bangladés, evaluando la altura máxima de las marejadas a lo largo de la costa del país y la frecuencia de estas marejadas en diferentes escenarios climáticos.
Los hallazgos del estudio indican que, bajo un escenario de calentamiento global aumentado, las tormentas que anteriormente se consideraban eventos de 100 años, que producen los valores más altos de marejada, podrían repetirse cada década o menos hacia finales de este siglo, lo que aumentaría significativamente el riesgo de inundaciones catastróficas. Además, se prevé que los ciclones tropicales en Bangladés ocurran en una ventana estacional más amplia, potencialmente superponiéndose en ciertos años con la temporada de monzones.
La situación climática en Bangladés no es única; los problemas que se presentan en este país se reflejan en diferentes formas en otras partes del mundo, donde los desafíos pueden variar desde el estrés térmico hasta la amplificación de sequías o incendios forestales. No obstante, la narrativa subyacente sobre la catástrofe climática es similar.