En verano podemos encontrarnos con dos tipos de personas. Por una parte las que aprovechan en cuanto pueden para irse de viaje. Por otra, quienes prefieren quedarse en casa y dedicar su tiempo a arreglar alguna cosa, cambiar la decoración o emprender alguna reforma. Son conscientes de que el descanso será mínimo, pero a cambio recibirán un beneficio que disfrutarán a medio y largo plazo. Tareas como reforzar y mejorar el suelo o aumentar la seguridad son algunas de ellas.
Suelos de hormigón
El hormigón armado ha dejado de ser una superficie gris y sin encanto. De hecho, hoy se puede escoger en diferentes colores y acabados, sin que ello suponga un cambio en sus propiedades. Se emplea en pavimentos para zonas de aparcamiento, patios y jardines en los que se quiere tener un espacio libre de tierra, etc. El calor ayuda a que el material esté antes en perfectas condiciones, aunque hay una serie de factores a tener en cuenta para que el resultado sea óptimo. Se puede ver más información en Pisos de hormigón armado: Preparación y Implementación.
Aunque el hormigón que podríamos denominar como clásico no es la única opción que existe hoy en día. También se pueden encontrar otras muy interesantes y decorativas, como los acabados que tiene el hormigón impreso, que no solo se utiliza para el suelo sino que también se puede aprovechar para hacer paredes y bancos, por ejemplo. O el hormigón drenante, que se emplea para crear caminos y espacios en los que se quieren aprovechar las propiedades del hormigón y a la vez evacuar el agua de riego o de la lluvia y que no se formen balsas. En la página web ehormigonimpreso.com/hormigon-drenante aparece una lista con todas las opciones para las que se puede utilizar.
Pensando en la seguridad
Uno de los apartados a los que se les da menos importancia tristemente es a la seguridad. A menudo solo se hace cuando nos enteramos de que han entrado a robar en una vivienda cercana y nos damos cuenta de que la próxima puede ser la nuestra. El verano puede ser también una buena época para echar un vistazo al estado de las cerraduras, ventanas, puertas y rejas. Trabajos que se hacen mucho mejor si es junto a expertos. Puedes encontrar cerrajeros baratos en Elche que te ayudarán tanto a identificar qué aspectos de seguridad se pueden mejorar como los sistemas más recomendables para cada caso. Desde mecanismos de retención para puertas automáticas hasta las denominadas cerraduras invisibles, que convertirán tu casa o negocio en un espacio mejor preparado para las técnicas que utilizan los amigos de lo ajeno.
Rincones más acogedores
Aunque no hace falta cambiar el suelo del garaje o renovar todas las cerraduras para sentirse más a gusto. También se pueden hacer pequeños cambios que aumentan el bienestar, como colocar una pérgola para tener sombra en el jardín o poner un aire acondicionado portatil silencioso en el comedor que permita aliviar los calores del verano. Por no hablar de clásicos como cambiar la distribución de los muebles o pasar tiempo haciendo bricolaje. Es sorprendente lo que se puede conseguir con algo tan simple como unos pomos nuevos en las puertas de la cocina, o renovando un mueble antiguo para darle nueva vida.
Este tipo de tareas tienen quienes las odian y quienes la adoran. Para este último grupo, comprobar cómo quedan los cambios es tan placentero como marcharse de vacaciones unos días.
