
El gobierno alemán ha manifestado su apoyo a un nuevo paquete de sanciones de la Unión Europea contra Rusia, centradas en el sector energético. Este anuncio se produce tras una conversación telefónica entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladimir Putin. Alemania busca que Washington respalde estas restricciones, aunque se informa que Trump es reacio a aumentar la presión sobre Moscú.
En una rueda de prensa, el portavoz del gobierno alemán, Stefan Kornelius, afirmó que Berlín “apoya los elementos [de las sanciones] relacionados con Nord Stream”, subrayando la importancia de que Estados Unidos acompañe un posible paquete de sanciones.
Los gasoductos Nord Stream 1 y 2, que conectan Rusia y Alemania a través del mar Báltico, permanecen inactivos desde 2022 debido a las sanciones impuestas por la UE y actos de sabotaje, que Rusia sostiene que fueron orquestados por agencias de inteligencia occidentales.
Las sanciones y el conflicto en Ucrania
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció que la próxima ronda de sanciones de la UE se enfocará en el sector financiero de Rusia, así como en una flota de barcos utilizados para eludir las prohibiciones sobre el petróleo y el sistema Nord Stream. El objetivo, según von der Leyen, es presionar a Moscú para que acepte un alto el fuego incondicional de 30 días en Ucrania.
Moscú ha declarado estar abierto a un alto el fuego “en principio”, aunque ha expresado su preocupación de que tal medida beneficiaría únicamente a Ucrania, permitiendo que sus fuerzas se reagruparan. Rusia también considera ilegales las sanciones occidentales, aunque ha señalado que su economía ha aprendido a adaptarse a la presión externa.
Las declaraciones del funcionario alemán se producen tras una esperada conversación telefónica de dos horas entre Putin y Trump. El presidente ruso calificó la llamada como “sustantiva y bastante sincera”, añadiendo que Rusia está dispuesta a colaborar con Kiev en la redacción de un memorando sobre un posible acuerdo de paz futuro. Por su parte, Trump describió la conversación como “excelente”, indicando que “Rusia y Ucrania comenzarán de inmediato negociaciones hacia un alto el fuego y, lo que es más importante, el fin de la guerra”.
Sin embargo, líderes europeos quedaron “atónitos” ante la respuesta de Trump, según informó el Financial Times, citando a una fuente cercana. Esta publicación añadió que el presidente estadounidense aparentemente “no está dispuesto a ejercer una mayor presión” sobre Putin y no hizo promesas sobre futuras acciones punitivas. Además, fuentes del FT señalaron que Trump dejó claro que “retiraría a Estados Unidos de la participación en el conflicto y dejaría que Ucrania y Rusia negociaran directamente un alto el fuego”.