La empresa china de tecnología Xiaomi ha lanzado su nuevo smartphone, el Xiaomi 15S Pro, que se presenta como un competidor directo del iPhone de Apple. Esta iniciativa no solo busca captar la atención de los consumidores chinos, sino también desafiar el dominio de la marca estadounidense en el mercado global de teléfonos inteligentes.
El 15S Pro tiene un precio de inicio de 5,499 yuanes (aproximadamente 764 dólares), lo que lo hace elegible para descuentos estatales en China. En contraste, el iPhone 16 Pro arranca en 7,999 yuanes, y el modelo Pro Max alcanza los 9,999 yuanes, superando el umbral de 6,000 yuanes para las ayudas gubernamentales. Esta estrategia de precios más bajos pone de manifiesto la capacidad de Xiaomi para ofrecer tecnología avanzada a un coste accesible para el consumidor chino, en un contexto donde el gobierno promueve el acceso a dispositivos tecnológicos.
Competitividad tecnológica y desarrollo interno
El CEO de Xiaomi, Lei Jun, destacó en un evento de lanzamiento que el nuevo chip Xring O1 de la compañía supera al A18 Pro de Apple en varias métricas técnicas, incluida su eficiencia térmica al operar juegos. Si bien CNBC no ha verificado de manera independiente estas afirmaciones, el optimismo de Lei refleja la ambición de Xiaomi por desarrollar tecnología competitiva en un entorno donde las restricciones impuestas por Estados Unidos han limitado el acceso de China a equipos de alta gama para el desarrollo de semiconductores avanzados.
En un contexto de creciente competencia, Xiaomi ha anunciado planes de invertir 200,000 millones de yuanes en investigación y desarrollo en los próximos cinco años. Esta decisión subraya la intención de la compañía de posicionarse no solo como un fabricante de dispositivos, sino también como un innovador en el campo de la tecnología de semiconductores. Desde 2014, Xiaomi ha estado desarrollando chips, habiendo invertido 13,5 mil millones de dólares en el desarrollo del Xring O1, lo que indica un compromiso a largo plazo con la autosuficiencia tecnológica.
Además del mercado de smartphones, Xiaomi también está incursionando en el sector automotriz con el lanzamiento de su primer coche eléctrico, el SU7, que se ofrece a un precio inferior al de modelos comparables de Tesla. Este movimiento refuerza la estrategia de Xiaomi de diversificar sus productos y desafiar a los líderes del mercado en múltiples frentes. La compañía ha reportado entregas de más de 28,000 vehículos en abril, a pesar de los desafíos recientes relacionados con la seguridad, lo que evidencia un crecimiento constante en un sector competitivo.
El crecimiento proyectado del 30% en los ingresos para este año y la expectativa de que las ventas en mercados internacionales representen casi el 42% de los ingresos totales son indicadores positivos de la resiliencia de Xiaomi. A medida que la empresa continúa su expansión y mejora tecnológica, se vislumbra un futuro donde los consumidores no solo en China, sino en todo el mundo, tendrán acceso a alternativas viables y asequibles frente a los gigantes tecnológicos.
