El próximo lunes 20 de enero, Donald Trump será investido como el 47º presidente de los Estados Unidos en una ceremonia que promete ser objeto de gran atención mediática. A medida que se acerca la fecha, la especulación sobre qué artistas musicales actuarán durante la ceremonia continúa en aumento. Sin embargo, la lista de posibles intérpretes es notablemente reducida.
Este evento se celebra en un contexto inusual, ya que por primera vez se izarán todas las banderas estadounidenses a media asta. Esta decisión se debe a que el presidente saliente, Joe Biden, ha declarado un período de luto de 30 días en honor al expresidente Jimmy Carter, quien falleció recientemente. Trump ha expresado su descontento por esta situación, afirmando en redes sociales que es una conspiración demócrata y que «nadie quiere ver esto».
La tradición establece que el presidente saliente asista a la ceremonia de investidura de su sucesor. En este caso, Biden estará presente, a diferencia de Trump, quien se ausentó de la ceremonia de Biden en 2020 tras alegar un fraude electoral. A esta investidura, Trump ha invitado a varios líderes mundiales y personalidades políticas, como la primera ministra italiana Giorgia Meloni y el líder de Reform UK, Nigel Farage, además de figuras del entretenimiento como Hulk Hogan y Joe Rogan.
Históricamente, las ceremonias de investidura han contado con actuaciones musicales de renombre. En el caso de Trump, su primera investidura en 2017 fue marcada por dificultades para conseguir artistas de prestigio. Aunque su equipo ha negado las afirmaciones, varios artistas han declarado haber sido invitados pero declinado la oferta, incluidos Elton John, 2Chainz y Céline Dion. En su lugar, Trump tuvo actuaciones de artistas menos reconocidos, como el cantante de country Toby Keith y la banda 3 Doors Down.
La situación actual no parece ser diferente, ya que la selección de artistas para la ceremonia de 2024 es limitada. A diferencia de las celebridades que se alinearon con la candidatura de Kamala Harris, los artistas que apoyan a Trump suelen ser de un perfil más bajo. Su equipo probablemente argumentará que buscan intérpretes que resuenen con la base de apoyo de MAGA, en lugar de artistas de renombre que han amenazado con acciones legales por el uso no autorizado de sus canciones durante la campaña.
Algunas de las opciones que podrían aparecer en la ceremonia incluyen a:
Jackie Evancho
La cantante clásica y exconcursante de «America’s Got Talent» ya había interpretado el himno nacional en la primera investidura de Trump en 2017. Sin embargo, ha expresado su decepción por la postura de Trump sobre los derechos de las personas trans, lo que hace poco probable su participación este año.
Veredicto: No asistirá.
Lee Greenwood
Este cantante de country ha sido una figura habitual en los mítines de Trump y ha estado en el centro de la controversia por la promoción de su libro «God Bless The USA Bible». Su fuerte patriotismo podría garantizar su lugar en la ceremonia.
Veredicto: Probable.
Kid Rock
El rockero, conocido por su apoyo a Trump, ya ha actuado en eventos relacionados con el presidente. Su cercanía ideológica y su popularidad entre los seguidores de Trump lo posicionan como un candidato fuerte para actuar en la investidura.
Veredicto: Apuesta segura para el cartel.
Jason Aldean
El músico, conocido por dedicar canciones a Trump en sus conciertos, podría ser otro de los artistas elegidos, dado su apoyo público al presidente.
Veredicto: Muy posible.
Mary Millben
Esta cantante ha expresado su deseo de participar en la investidura, habiendo cantado en otros eventos importantes relacionados con Trump. Su presencia parece casi asegurada.
Veredicto: Alta probabilidad.
50 Cent
A pesar de que el rapero fue invitado a actuar en el pasado, su negativa a hacerlo lo coloca en una posición poco probable para esta ocasión.
Veredicto: Muy poco probable.
Kanye ‘Ye’ West
Aunque ha mostrado apoyo a Trump en el pasado, su situación actual es complicada y su participación sería una sorpresa, aunque no imposible.
Veredicto: Una opción arriesgada, pero no se descarta.
Mientras se acerca el día de la investidura, la atención de los medios y el público se centrará en quiénes serán los elegidos para dar realce a un evento que, a pesar de la controversia, seguirá siendo un pilar de la política estadounidense.