La reciente operación militar llevada a cabo por las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) en la ciudad de Jenin, situada en el norte de Cisjordania, ha resultado en un desplazamiento forzado masivo de la población local. Según la agencia de noticias palestina WAFA, esta acción ha dejado a un gran número de familias sin hogar.
El pasado domingo, las IDF demolieron decenas de edificios en Jenin, utilizando explosivos que han sido ampliamente documentados en videos compartidos en redes sociales. Esta operación forma parte de una campaña más amplia, calificada como “operación antiterrorista”, que se inició hace aproximadamente dos semanas. De acuerdo con el Jerusalem Post, la destrucción de estas estructuras fue ordenada por el Ministro de Defensa israelí, Israel Katz, quien ha exigido que se eliminen todos los edificios vinculados a actividades terroristas.
WAFA informa que la mayoría de los edificios destruidos eran residenciales y que, como resultado de las demoliciones, se ha producido un desplazamiento significativo de la población. El director de un hospital local, Wisam Baker, ha indicado que las explosiones también causaron daños en el centro médico, aunque hasta el momento no se han reportado víctimas mortales tras las demoliciones.
Las IDF han confirmado la destrucción de un total de 23 estructuras en la zona. Además, han llevado a cabo operaciones terrestres en otras localidades de Cisjordania, como la ciudad de Tammun, donde afirman haber eliminado al menos a 50 “terroristas” y detenido a más de 100 “sospechosos”.
Desde el inicio de esta operación en Jenin, WAFA reporta que al menos 25 palestinos han perdido la vida y decenas más han resultado heridos. Aproximadamente 15,000 personas han sido desplazadas de su hogar, principalmente del campo de refugiados de Jenin y áreas circundantes. Asimismo, se ha informado de la destrucción de las líneas de suministro de agua en la localidad, aunque desde Jerusalén no se ha emitido comentario alguno al respecto.
Contexto de la operación
La campaña, denominada “Muro de Hierro”, fue lanzada pocos días después de que se alcanzara un acuerdo de alto el fuego con Hamas en Gaza, tras un conflicto que se prolongó durante más de un año. El Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha declarado que el objetivo de esta operación es “erradicar el terrorismo” en la región, en un esfuerzo sistemático y decidido por atacar el “eje iraní dondequiera que envíe sus armas”.
La situación en Jenin y en otras áreas de Cisjordania continúa siendo tensa, con un aumento de las operaciones militares israelíes en respuesta a lo que consideran amenazas de seguridad. La comunidad internacional observa con preocupación el impacto humanitario de estas acciones, que agravan aún más la crisis en la región.
