
Larry Fink, CEO de BlackRock, ha transmitido un mensaje claro a los inversores: la adquisición más pequeña del año pasado por parte de la mayor gestora de activos del mundo podría resultar ser la más significativa. Durante una conferencia del sector en marzo, Fink mencionó que la compra de 3.200 millones de dólares de Preqin, un proveedor de datos sobre activos alternativos, es «probablemente lo más relevante que hemos hecho en términos de expansión del perfil de los mercados privados». Este movimiento podría representar una gran oportunidad para los inversores, ya que Preqin permitirá a BlackRock ofrecer lo que mejor sabe hacer —productos indexados como los ETFs en mercados públicos— al opaco mundo de los mercados privados.
La integración de los datos de Preqin en plataformas de BlackRock, como el sistema de gestión de carteras Aladdin y el software de inversión eFront, proporcionará a los clientes de BlackRock, en su mayoría inversores institucionales, una mayor visibilidad en áreas de inversión no públicas como infraestructuras, capital privado y crédito privado. Según BlackRock, esto les proporcionará datos de valoración y rendimiento sobre más de 190.000 fondos y 60.000 gestores.
Transparencia y Oportunidades en Mercados Privados
Fink comparó la situación actual de la inversión en mercados privados con la compra de una vivienda en un vecindario desconocido antes de la llegada de plataformas como Zillow, que simplifican la búsqueda de precios justos. «Esta falta de transparencia desincentiva la inversión», subrayó, indicando que la nueva aventura podría aliviar parte de la presión sobre el negocio de índices de BlackRock, que gestiona trillones de dólares y que compone una parte significativa de sus ingresos totales.
A pesar de que BlackRock ha cosechado enormes beneficios como gestora de activos tradicional y ha liderado la industria en ETFs, los flujos de ingresos de esta división todavía están sujetos a la volatilidad del mercado de valores. La estrategia a largo plazo es crear sus propios índices de mercado privado y ofrecer productos indexados más accesibles para los inversores.
Sin embargo, el acceso de los inversores minoristas a inversiones en mercados privados no está exento de riesgos. Moody’s ha advertido que ofrecer fondos a estos inversores podría resultar en «pérdida de reputación, mayor escrutinio regulatorio y mayores costos» para los gestores de activos. A pesar de estas advertencias, Fink ha expresado su confianza en que «los mercados privados no tienen por qué ser tan arriesgados, ni opacos, ni estar fuera de alcance», insistiendo en que la innovación en la industria de inversiones es clave para superar estos desafíos.
La adquisición de Preqin también debería atraer a más clientes y profundizar las relaciones existentes, ya que la competencia en el ámbito de los proveedores de datos de mercados privados es limitada. Preqin cuenta con uno de los conjuntos de datos más completos disponibles, lo que podría resultar en contratos más valiosos con los clientes actuales y un aumento en las ventas. Desde la adquisición de eFront en 2019, BlackRock ha duplicado el valor anual de los contratos de ese negocio, lo que subraya la efectividad de su estrategia de integración de datos.
Además, la compra de Preqin expande aún más la firma en el creciente mundo de los mercados privados, que han crecido enormemente en los últimos años a medida que los inversores buscan alternativas. Esta tendencia es respaldada por la reciente compra de BlackRock de Global Infrastructure Partners por 12.500 millones de dólares y su expectativa de completar la adquisición de HPS Investment Partners por otros 12.000 millones en 2025.
En resumen, el movimiento de BlackRock hacia el sector de mercados privados refleja una evolución en la gestión de activos que podría beneficiar a numerosos inversores, ofreciendo nuevas oportunidades en un entorno financiero cada vez más complejo y competitivo.