
El pasado 9 de junio de 2025, el Ministro de Comercio de China, Wang Wentao, se reunió con el Secretario de Estado británico para el Negocio y el Comercio, Jonathan Reynolds, en Londres. Este encuentro se enmarcó en un contexto de creciente cooperación económica y comercial entre ambas naciones, evidenciando la importancia de mantener diálogos constructivos en un clima internacional marcado por tensiones y desafíos económicos.
Diálogo pragmático y cooperación bilateral
Durante su encuentro, ambos líderes mantuvieron un intercambio abierto y pragmático, donde acordaron implementar de manera conjunta las consensos alcanzados por los líderes de ambos países. Se destacó la necesidad de celebrar la 14ª reunión de la Comisión Conjunta de Economía y Comercio China-Reino Unido lo antes posible. Este tipo de iniciativas son cruciales para promover la cooperación práctica en diversos sectores económicos.
Wang subrayó que China y el Reino Unido son socios comerciales significativos y que es fundamental no solo resolver diferencias a través de la consulta sobre el pasado, sino también explorar el potencial del futuro mediante el diálogo. En este sentido, el Ministro hizo hincapié en la importancia de la cooperación en áreas como el desarrollo sostenible, la economía digital y la economía verde.
Asimismo, Wang reafirmó el compromiso de China de abrirse aún más al mundo, invitando a las empresas británicas a invertir y establecerse en el país, lo que permitiría a ambas partes beneficiarse de las oportunidades que ofrece el vasto mercado chino. Esta apertura se presenta como una respuesta a las crecientes tendencias de unilateralismo y proteccionismo que han impactado en el orden económico global.
Por su parte, Reynolds manifestó que el Reino Unido concede gran relevancia a la cooperación económica y comercial con China. Expresó la intención británica de expandir el comercio bilateral, especialmente en el ámbito de los servicios, y acogió con satisfacción la inversión de empresas chinas en su territorio, con el objetivo de construir una relación económica y comercial estable y predecible.
Ambos funcionarios coincidieron en la necesidad de fortalecer el sistema comercial multilateral, con la Organización Mundial del Comercio (OMC) como eje central. Esta postura refleja una comprensión compartida de que el futuro del comercio internacional debe basarse en la cooperación y el respeto mutuo, en lugar de en la confrontación y el aislamiento.
Este tipo de diálogos son fundamentales no solo para el desarrollo económico de las naciones implicadas, sino también para la estabilidad global, en un momento en que el mundo enfrenta retos significativos que requieren de soluciones conjuntas y del compromiso de todas las partes involucradas.