OpenAI ha dado un paso significativo hacia el control de su infraestructura tecnológica con su reciente asociación con Broadcom, un movimiento que marca su entrada en el negocio de la fabricación de chips. Esta decisión contrasta con la visión inicial de la empresa, que apostaba por algoritmos más inteligentes en lugar de depender de una mayor capacidad de procesamiento.
El CEO de OpenAI, Sam Altman, presentó este acuerdo en un podcast, señalando que la clave para el éxito ha sido la escala. Según Altman, la empresa ha descubierto que contar con más recursos computacionales permite obtener mejores resultados, lo que ha llevado a una reestructuración fundamental en su enfoque. La asociación con Broadcom permitirá a OpenAI diseñar y desplegar racks de aceleradores de IA personalizados, optimizados para sus propios modelos, lo que le otorga un control más profundo sobre su infraestructura.
Una estrategia de integración vertical
Este movimiento hacia un enfoque de integración vertical se asemeja a lo que empresas como Apple han hecho en el pasado con sus chips M-series. Controlar los semiconductores permite a OpenAI gestionar la experiencia del usuario de manera más efectiva. La nueva arquitectura de hardware no solo se centrará en los chips, sino que también abarcará todos los niveles de la infraestructura, desde el almacenamiento hasta el procesamiento y la red, creando así un sistema más cohesionado.
OpenAI no solo está optimizando su hardware, sino que también está explorando el desarrollo de dispositivos nativos de IA. La adquisición de la startup de Jony Ive, conocida por su diseño innovador, es un claro indicativo de que OpenAI busca no solo ser un motor detrás de experiencias de IA, sino también poseerlas. Esto podría llevar a la creación de dispositivos que transformen la forma en que los usuarios interactúan con la inteligencia artificial, moviéndose más allá de las pantallas y los teclados hacia experiencias más intuitivas.
La rápida serie de acuerdos y lanzamientos de productos de OpenAI está formando un ecosistema de IA completo, similar al que han creado gigantes tecnológicos en otras áreas. La reciente campaña llamada Stargate, que incluye el despliegue coordinado de chips y centros de datos, es un testimonio de la ambición de OpenAI por establecerse como líder en infraestructura de IA.
A medida que OpenAI continúa expandiendo su presencia en el mercado, es evidente que su estrategia se basa en un enfoque holístico que combina hardware y software. Esta visión podría redefinir el futuro de la inteligencia artificial, proporcionando no solo herramientas poderosas, sino también un marco completo para su implementación y desarrollo.
