Desde que allá por enero de 2011, entrara en vigor la conocida como ley antitabaco que prohibía fumar en espacios de uso colectivo y locales abiertos al público que no estuviesen al aire libre, cientos de españoles dejaron de fumar. Sin embargo, y a pesar de que muchos fumadores consiguieron acabar con su hábito, todavía son muchos los que continúan fumando y no tienen pensado dejarlo. Desde Vap Store Alcobendas indican que “los mitos que rodean a los cigarrillos electrónicos son abundantes, pero lo cierto es que es un 95% menos perjudicial que el tabaco y que el 92% de los 460.000 vapeadores españoles que lo utilizan han logrado dejar de fumar”.
Por todos es sabido que el tabaco es perjudicial para la salud, siendo la primera causa de muerte evitable en el mundo. Las estadísticas demuestran que en la actualidad, el 28% de los españoles son fumadores y que mata a más de 700.000 personas cada año en la Unión Europea, cifra que se eleva hasta los 7 millones si tenemos en cuenta todo el planeta.
Como método de ayuda a todos aquellos que deseaban dejar de fumar surgió el cigarrillo electrónico, que es empleado en la Unión Europea por más de 10 millones de personas, 460.000 en España. Sin embargo, como indican desde Vap Store Alcobendas, el cigarrillo electrónico está rodeado por mitos como:
- Es otra forma de fumar. Lo que se introduce en el cuerpo es vapor de una sustancia compuesta por otras cuatro: propilenglicol, glicerol, aromas alimentarios y nicotina en el grado demandado por el consumidor (que puede ser cero).
- Es igual de perjudicial que el tabaco. Tras una década de estudios se ha demostrado que vapear es un 95% menos perjudicial que fumar.
- Es perjudicial para los que te rodean. A diferencia que en el caso del tabaco, no existe el vapeador pasivo.
A los anteriores deben sumarse otros como que sus líquidos contienen sustancias cancerígenas, que es una puerta al tabaco o que no sirve para dejar de fumar. Sin embargo, el estudio más relevante al respecto indica que más de 6 millones de fumadores de la Unión Europea habían dejado de fumar, y otros 9 millones habían reducido notablemente su consumo de tabaco gracias a los cigarrillos electrónicos.
Por lo tanto, se puede afirmar que el cigarrillo electrónico ayuda a salvar vidas.
