Desde hace años se habla mucho de los minerales de “la Nueva Era” y uno de estos minerales o piedras que mayor atracción causa es la shungit. Algunos la denominan la piedra inteligente o el agujero negro y como primer aspecto interesante de este material es es foco de energía electromagnética.
En la mineralogía causa mucho interés, pues una de las características del mineral es la de neutralizar la información negativa que llega hasta nosotros a través de las ondas electromagnéticas de los aparatos que utilizamos en nuestro día a día. La shungit, según esta creencia, estabiliza nuestra energía corporal.
Los aspectos más destacados de este mineral
Atendiendo a sus propiedades físicas y químicas, la shungit es un mineral natural carbonoso que desde hace años se utiliza en disciplinas como la nanotecnología. Hasta el momento es el único mineral conocido que contiene “fullerenos”, una forma molecular de carbono descubierta por químicos Robert F. Curl, Sir Harold W. Kroto y Richard Smiley.
Además de carbono, la shingut está compuesto por silicio, aluminio, hierro, magnesio, calcio, azufre, fósforo y otros micro elementos. Se trata de un mineral muy antiguo y posee una superconductividad eléctrica superior a la del oro.
Por sus propiedades, este mineral es objeto de estudio de muchos proyectos relacionados con la salud y la nutrición, atribuyéndole propiedades antioxidantes y capacidad antienvejecimiento.
En un pano más metafísico, hay quien sostiene que la shungit tiene una acción importante sobre el biocampo, es decir, sobre todos aquellos organismos vivos que emiten radiación magnética de baja frecuencia.
¿Por qué ha obtenido tanto reconocimiento este mineral?
A la shungit se le atribuyen propiedades que permiten neutralizar la información negativa, disminuir los dolores corporales, dinamizar el organismo y cargarlo de energía positiva.
Su uso está enfocado en esa parcela de la medicina natural relacionada con los tratamientos alternativos. La shungit no cura por sí misma, pero reactiva la inteligencia celular, siendo las propias personas las que obtienen mejoras físicas y mentales en su salud.
¿Cuál es la apariencia de esta piedra?
A primera vista, parece un material similar al carbón, aunque también guarda ciertas similitudes con la turmalina negra. Con ambos comparte ciertas propiedades, aunque más con el carbón que con la turmalina.
La shungit es, como la turmalina, brillante, y a partir de ella se pueden moldear figuras y joyas. En La Voz de Gaia puedes encontrar este mineral en diferentes formatos: desde cantos rodados, hasta esferas y pirámides e incluso colgantes, pulseras y pendientes, al mejor precio.
Los aficionados a esta piedra pueden optar por cualquier de sus formatos y lo que buscan al portarlo es beneficiarse de sus numerosas propiedades. Su capacidad para aliviar el dolor explica buena parte de su fama adquirida en los últimos años. Presenta un poder desbloqueante muy importante, y más allá de sus propiedades, es de reseñar el efecto de mejora de la autoestima que causa en quienes lo portan.
La shungit como remedio cosmético
Las utilidades de la shungit no solo se limitan a su utilización en joyería, mineralogía, coleccionismo o medicina alternativa, sino que también son cada vez más comunes los tratamientos cosméticos a partir de este mineral o en los que participa esta piedra.
Así, algunos rituales en los que se hace uso de esta piedra están diseñados para detoxificar al máximo estimulando el rostro y al mismo tiempo todo el cuerpo. Se trata de una interpretación holística de la cosmética en la que se crea un espacio de sinergia entre las manos, las herramientas de estimulación y la cosmética. El objetivo es conseguir una experiencia sensorial agradable para alcanzar un efecto rejuvenecedor importante.
Para estimular la piel de manera profunda podemos utilizar piedras de shungit sobre el rostro. Estos suaves masajes, unidos a la aplicación de productos a partir de nutrientes concentrados aceleran la regeneración celular, detoxifican el organismo y activan la circulación, devolviendo el aspecto brillante a la piel.
Ya sea para mejorar el estado de ánimo, eliminar las sensaciones y el aura de negatividad o devolver un aspecto brillante a la piel, la shungit funciona de forma correcta y reactiva en todo aquello que no funciona en nuestro organismo, propiciando esa capacidad autoregeneradora del organismo y potenciando el equilibrio mental, físico y emocional.
