Tragedia en la regata Sídney-Hobart: dos muertos en accidentes separados
Durante la emblemática regata entre Sídney y Hobart, dos personas han perdido la vida en accidentes trágicos ocurridos en la noche del evento. Según el Club de Yates de Crucero de Australia, encargado de la organización de la carrera, ambos incidentes se produjeron cuando las víctimas fueron golpeadas por la botavara de sus respectivos barcos. A pesar de los intentos de reanimación realizados por otros tripulantes, no fue posible salvar sus vidas.
Los accidentes tuvieron lugar en condiciones de navegación difíciles, caracterizadas por fuertes vientos que complicaron la situación en el mar. La Policía Acuática de Australia se ha hecho cargo de la investigación, aunque hasta el momento no se han proporcionado más detalles sobre las circunstancias exactas de los incidentes.
Reacciones y medidas de seguridad
David Jacobs, comodoro del Club de Yates de Crucero de Australia, expresó su consternación durante una rueda de prensa, afirmando que «todo el mundo está devastado» por lo sucedido. Jacobs subrayó la importancia de mejorar la seguridad en futuras ediciones de la regata, indicando que se llevará a cabo una investigación para determinar si se pueden implementar medidas adicionales para prevenir tragedias similares.
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, también se pronunció sobre la tragedia a través de la red social X, enviando sus condolencias a las familias de las víctimas. Albanese destacó que la regata Sídney-Hobart es una tradición muy arraigada en Australia y que es desgarrador que se haya visto empañada por la pérdida de vidas en un evento que debería ser motivo de celebración.
La regata Sídney-Hobart, que se celebra anualmente desde 1945, cubre una distancia de 630 millas náuticas (1.166 kilómetros) desde Sídney hasta Hobart, la capital de Tasmania. Este evento atrae a numerosos participantes y espectadores, convirtiéndose en un símbolo de la cultura marítima australiana.
