Las vacaciones de verano están a la vuelta de la esquina, y con ellas aumenta el número de casos de carding en España. Se trata de una forma de fraude con tarjeta de crédito que cada año afecta a cientos de miles de españoles, según datos del Banco de España.
Uno de los mayores miedos con los que vive la población es el robo de sus tarjetas. Aunque pueda parecer un temor infundado, la verdad es que anualmente miles de tarjetas de crédito son robadas y utilizadas en operaciones fraudulentas.
A esta actividad ilícita se le conoce como carding. Se trata de un término que abarca todo tipo de actividades realizadas con una tarjeta de débito o crédito ajena, como pagar gastos, realizar compras no autorizadas o sacar dinero de la cuenta de otra persona.
El carding es una amenaza real. Por ello, la Oficina de Seguridad del Internauta y el INCIBE invitan a los ciudadanos a mantenerse alertas y a protegerse contra este tipo de fraudes que, aunque consiste en operaciones fraudulentas pequeñas, tiene un impacto global en decenas de miles de euros.
¿Cómo funciona el carding?
Erróneamente, algunas personas consideran que el carding solo funciona si se realiza el robo de la tarjeta física. Ciertamente, es una de sus modalidades, pero los malhechores pueden hacerse con los datos necesarios de una tarjeta de crédito y operar de forma online, sin necesidad de contar con la tarjeta física.
Para eso, ponen en práctica métodos convencionales como el phishing, con el cual obtienen de forma creativa y variada el número de control CCV de la tarjeta y su fecha de vencimiento, esencial para hacer todo tipo de operaciones online.
Los delincuentes también recurren al skimming, que les permite, sin tocar a su víctima, extraer los datos de su tarjeta y transferirlos a una falsa. El shoulder surfing, por su parte, apuesta por mirar por encima del hombro de la víctima cuando esta se encuentra realizando una operación con su tarjeta.
No obstante, en los últimos años, cada vez más criminales deciden comprar números de cuenta falsos en el mercado negro o crearlos a través de algoritmos. Por estas razones, un importante número de personas prefieren invertir en sistemas de seguridad de alta calidad y protección como los que ofrece la empresa líder en servicios de ciberseguridad, Panda Security.
¿Cómo protegerse contra el carding?
Sí es posible protegerse contra el carding. Para ello, es necesario revisar de forma regular los estados de cuentas bancarios, el informe de crédito y mantener actualizados el sistema operativo y el software antivirus de los dispositivos para protegerse contra el phishing y otros métodos delictivos.
Además, conviene mantenerse alerta ante señales como las llamadas o mensajes de números desconocidos, el comportamiento extraño del dispositivo móvil u ordenador, y los errores de las plataformas web no oficiales.
Como se puede ver, el carding es una amenaza real que puede poner en aprietos al presupuesto familiar. Por eso, es importante mantenerse alerta y tomar las precauciones necesarias para evitar este tipo de fraude durante las vacaciones.