Solemos preocuparnos por la seguridad de nuestras conversaciones en los servicios de mensajería y no es para menos. Nadie tiene por qué entrar en mi conversación privada y conocer los detalles de mi relación, de mi negocio o de mi estilo de vida. Esta misma incertidumbre se plantea en las redes sociales, pues solemos oír demasiadas veces que la privacidad en Facebook es muy limitada, tanto para los organismos del estado como para empresas, a las que se les vende parte de nuestra información para usos a los que no hemos dado el visto bueno. Pero también están los hackers que entran a ver tus fotos y estados, sin haber sido invitados.
El término hacking se refiere a la acción de explorar y buscar las limitaciones de un código o de una máquina, ya que a esto se dedicaban los primeros hackers, a modificar una máquina o un programa y, posteriormente, a introducirse dentro de los computadores personales, gubernamentales o empresariales, en busca de datos e informes que pudieran ser interesantes para sus fechorías.
Existen distintos tipos de hackers o crackers. El troyano, que instala un programa que sirve como una herramienta remota para atacar y una vez ejecutado, controla la computadora infectada. El analizador, que lee las tramas de información que viajan por la red. Por fuerza bruta, que mediante un sistema secuencial prueba todas las combinaciones posibles para una contraseña. Otra forma de ataque es lo que se conoce como inundación, consistente en saturar al usuario con mensajes vía mensajería instantánea, al punto que la computadora deja de responder y se colapsa. También está el engaño, por medio de correos electrónicos, a los usuarios que tienen cuentas bancarias o phishing. La creación de sitios web falsos o la suplantación que pretende recabar información, como cuentas de usuario, claves, etc. o por la incursión de los troyanos en la computadora, que únicamente recaban información de usuario. Estos tres últimos son los más extendidos en la actualidad.
Nuestra seguridad
Se ha ampliado y extendido tanto la información de los métodos y formas de espiar y hackear que, cualquiera de nosotros, puede introducirse en el Facebook o leer los mensajes de las aplicaciones de mensajería instantánea como whatsapp. Como decíamos al comenzar este texto, la preocupación de que alguien sea capaz de conocer nuestros secretos, o un desconocido pueda tener acceso a la información personal que subimos a las redes, aumenta cada día.
Por lo tanto, es de gran utilidad conocer a fondo los mecanismos y sistemas que se emplean para espiar whatsapp, para poder defendernos de alguien que intente hacer lo propio con nuestras aplicaciones e intente hackear whatsapp de nuestro smartphones. Los hacks de Whatsapp más utilizados, ya que son los más efectivos, son el mSpy, con el que se pueden monitorear todas las llamadas, entre otros muchos servicios. El Highster mobile, que no requiere el dispositivo para enraizarse y ofrece acceso remoto, entre otras ventajas, y el flexispy, que es la aplicación más avanzada de las que hemos nombrado, permitiendo escuchar llamadas en vivo y grabar todas las llamadas.
Para evitar que estas herramientas sean utilizadas en contra tuya, bloquea whatsapp con Wharslock, no compartas el teléfono con extraños, bloquea la instalación de fuentes desconocidas, evita en lo posible el uso del whatsapp en un WiFi desconocido y, siempre, debes ser cuidadoso con la comunicación que se realiza a través del whatsapp.
Del mismo modo, se hace imprescindible conocer los métodos que se utilizan para hackear Facebook. En este caso, cabe aun más interés, ya que solemos colgar imágenes personales que pueden ser manipuladas y terminar en lugares nada aconsejables. Si quieres saber cómo hackear Facebook te recomendamos que entres en el anterior enlace, pero recuerda que espiar es ilegal, tanto para Facebook como para whatsapp. Los motivos por los que las personas quieren utilizar los hacks para Facebook disponibles son muchos, pero no debemos dejarnos llevar por los celos o por enfados y egoísmos para practicar estas artes.
Sin embargo, sí comprendemos los casos en los que los padres actúan de este modo, solo para proteger a sus hijos, para saber si han iniciado o mantienen algún tipo de relación tóxica con algún elemento peligroso. Este caso está más que justificado para violar su intimidad y actuar en consecuencia.
En cualquier caso, advertimos que hackear Facebook no es nada fácil. Uno de los métodos más utilizados es el de los llamados exploits y consiste en abrir una página web de Facebook de forma falsa para que entregues tus datos.