«Estaba en la Puerta del Sol, llegaba a casa de un amigo. Los ultras del Madrid vieron los colores azul y rojo de la camiseta de San Lorenzo que llevaba y ahí empezó todo…», explicó Viggo Mortensen.
El actor, fiel seguidor del conjunto argentino, no podía imaginarse la que se iba a liar por llevar los colores de San Lorenzo. «Vinieron, me empezaron a pegar. Llevaba una bolsa con dos botellas de vino. Le rompí una en la cabeza a uno de ellos y salí corriendo», recordó Viggo Mortensen.
Al final, la cosa terminó así. «Llegué a casa de mi amigo sudando… cuando me ve, me dice: «¿es sangre?» y le expliqué que no… que era vino». Un día que no olvidará…