El jueves, la Folha de São Paulo informó que varias empresas brasileñas que apoyan a Jair Bolsonaro han estado financiando ilegalmente paquetes de mensajes de WhatsApp contra el Partido de los Trabajadores (PT) de Fernando Haddad. El Tribunal Superior Electoral brasilieño abre en consecuencia una investigación a Bolsonaro.
La fiscal general de la República brasileña, Raquel Dodge, pidió la noche de este viernes la apertura de una investigación para indagar en el caso de la compra de paquetes de envío de mensajes masivos contra Fernando Haddad, en beneficio de Jair Bolsonaro, que sigue por delante del candidato del Partido de los Trabajadores en los sondeos para la segunda vuelta de las presidenciales. Bolsonaro será ahora notificado y tendrá un plazo de cinco días para justificarse.
«Los hechos mencionados en reportajes periodísticos ya motivaron la apertura de un procedimiento rápido por la Procuraduría General Electoral (PGE)», se lee en la nota de la PGR citada por la prensa brasileña, que prosigue: «El objetivo es verificar la existencia de eventual utilización del esquema profesional por parte de las campañas, con el propósito de propagar noticias falsas.
El jueves, sobre la investigación a Bolsonaro la Folha de São Paulo informó que varias empresas brasileñas contrataron servicios de marketing para la distribución de «cientos de millones» de mensajes con propaganda anti-PT vía WhatsApp, en contratos que alcanzaban valores de 12 millones de reales (2,8 millones de euros). Una práctica prohibida por la ley electoral brasileña, que impide a las empresas financiar campañas electorales.
Ese día, la campaña de Fernando Haddad reaccionó realizando una petición de impugnación de la candidatura de Jair Bolsonaro. «Estamos ante un intento de fraude electoral», afirmó entonces el candidato del PT. «El presupuesto de esa campaña fue liquidar la elección en primera vuelta para que las noticias de hoy no salieran a la superficie.»