La 21ª edición del Festival Internacional de Cine de Marrakech concluyó con una emotiva ceremonia de entrega de premios, destacando el talento de cineastas de diversas partes del mundo. Este año, el galardón más prestigioso, la Estrella de Oro, fue otorgado a *Happy Holidays*, una obra del cineasta palestino Scandar Copti, que explora las vidas entrelazadas de cuatro personajes en un drama familiar.
El film de Copti no solo se alzó con el máximo reconocimiento, sino que también brilló en la categoría de actuación. Las actrices Wafaa Aoun y Manar Shehab compartieron el premio a la Mejor Actriz por sus interpretaciones como madre e hija, dejando una huella significativa en el jurado. Por su parte, el premio a Mejor Actor fue otorgado a Roman Lutsky por su papel en *Under The Volcano*, película dirigida por Damian Kocur, quien también fue reconocido con el premio a la Mejor Dirección.
El jurado hizo una excepción en esta edición al conceder dos Premios del Jurado en lugar de uno. La primera distinción fue para *The Cottage* de Silvina Schnicer, mientras que la segunda fue otorgada a Mo Harawe, un director somalí que presentó su primer largometraje, *The Village Next to Paradise*, previamente proyectado en la selección Un Certain Regard del Festival de Cannes de este año.
El festival se caracterizó por su rica programación, que incluyó ‘Conversaciones’ con directores de renombre y tributos a figuras como Naïma Elmcherqui, David Cronenberg y Sean Penn. Además, se destacó el programa de *Atlas Workshops*, que busca fomentar el desarrollo de proyectos cinematográficos mediante talleres con más de 300 profesionales de la industria. Esta iniciativa es un claro reflejo del compromiso del festival por impulsar el talento cinematográfico africano y árabe.
