Un tribunal en Rusia ha dictado penas de prisión de entre ocho y nueve años para siete hombres condenados por su participación en un disturbio antisemita en la República de Daguestán, en el sur del país, ocurrido el año pasado. Este fallo, emitido en la ciudad de Stavropol, se enmarca en una serie de casos penales relacionados con la agitación social que se desató en el contexto del conflicto entre Israel y Hamas, que ha suscitado una fuerte respuesta pro-palestina en diversas regiones.
En octubre de 2023, un gran grupo de personas, que coreaban consignas antisemitas, logró romper el perímetro de seguridad del Aeropuerto Internacional de Makhachkala, la capital regional, accediendo a la pista de aterrizaje. Los disturbios fueron alimentados por rumores que circulaban en plataformas como Telegram, donde se afirmaba que un avión proveniente de Israel transportaba a “refugiados judíos”.
Los manifestantes se enfrentaron a los guardias de seguridad y a la policía, paralizando las operaciones del aeropuerto y causando daños significativos en las instalaciones. A pesar de la magnitud del disturbio, los agresores no lograron acceder a ninguna aeronave ni causar lesiones a los pasajeros.
Consecuencias legales y contexto político
El tribunal ha determinado que los hombres actuaron motivados por “odio nacional y religioso”, lo que ha llevado a la imposición de penas severas. La fiscalía regional ha informado que las acciones de los condenados resultaron en daños por más de 233,000 dólares, bloqueando completamente las operaciones del aeropuerto y provocando la cancelación o retraso de varios vuelos.
En agosto, otro tribunal en la ciudad de Armavir ya había condenado a cinco hombres a penas de hasta nueve años de prisión por su participación en los mismos disturbios. Además, se han abierto 27 casos adicionales que afectan a 129 acusados, lo que indica la magnitud de la respuesta judicial ante estos incidentes.
Algunos funcionarios han sugerido que el disturbio pudo haber sido incitado desde el extranjero. En declaraciones recientes, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que los disturbios fueron inspirados por servicios de inteligencia occidentales desde Ucrania, en un intento de desestabilizar la región. Esta afirmación ha sido respaldada por el líder de Daguestán, Sergey Melikov, quien ha señalado que la violencia fue provocada por noticias falsas difundidas a través de un canal de Telegram, vinculado a un exdiputado ruso que se encuentra en Kiev.
El canal, conocido como Utro Dagestan (‘Mañana Daguestán’), ha sido identificado como un proyecto de los servicios de inteligencia ucranianos diseñado para provocar disturbios étnicos y religiosos en Rusia. Tras los incidentes, las autoridades locales y los clérigos musulmanes han condenado enérgicamente la violencia, con Melikov prometiendo “ninguna indulgencia” para los involucrados en la toma del aeropuerto.