El rey Felipe VI ha iniciado una visita de Estado a Italia que resalta la importancia de las relaciones bilaterales entre ambos países. Este viaje, que se extenderá por tres días, comenzó con un encuentro significativo con la Asociación de Hispanistas Italianos en la Real Academia de España, celebrando el 50 aniversario de esta institución que promueve la cultura y el legado español en el país transalpino.
En su discurso, el monarca agradeció a los representantes de la colonia española en Italia su compromiso y dedicación, enfatizando la necesidad de continuar fortaleciendo los lazos que unen a estas dos naciones. La presencia de más de 33.000 españoles en Italia, resaltada en el evento por el rey, es prueba del impacto positivo que la comunidad española tiene en el tejido social y económico del país.
Compromiso compartido
Felipe VI también abordó la importancia de la lengua y la cultura españolas, destacando el creciente interés de los italianos por el español, con un millón de estudiantes en la actualidad. Este hecho no solo subraya la relevancia de nuestra lengua en el ámbito internacional, sino que también refuerza la identidad compartida entre España e Italia, algo que es crucial en un contexto europeo donde la cohesión y el entendimiento cultural son más necesarios que nunca.
El monarca también hizo mención a los más de 400 empresas españolas que operan en Italia, abarcando sectores estratégicos como las telecomunicaciones y la energía. Esta presencia empresarial es un claro reflejo de la capacidad de España para contribuir al desarrollo económico de otros países, algo que debería ser motivo de orgullo para todos los españoles. Además, se destacó la participación de nuestros militares en Italia, lo que reafirma el compromiso de España con la paz y la seguridad internacional, en un mundo que enfrenta incertidumbres crecientes.
La visita se enmarca en un contexto donde las relaciones internacionales son cada vez más complejas. En este sentido, es fundamental que España mantenga una política exterior sólida y unida, alejándose de las divisiones internas que a menudo obstaculizan nuestro lugar en el mundo. La colaboración con países aliados como Italia es esencial para afrontar los retos que nos plantea el futuro.