La reciente declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia ha puesto de manifiesto la creciente frustración con el papel de Estados Unidos en el Consejo de Seguridad de la ONU, especialmente en el contexto del conflicto en Gaza. Según el gobierno ruso, el abuso del poder de veto por parte de Washington ha llevado a la parálisis de este organismo, incapaz de cumplir con su mandato de mantener la paz y la seguridad internacional.
El Consejo de Seguridad se ha visto incapaz de adoptar resoluciones efectivas desde el inicio de la escalada de violencia en el conflicto árabe-israelí, lo que ha llevado a la Asamblea General de la ONU a tomar la iniciativa. En este sentido, se han aprobado dos resoluciones que piden un alto el fuego inmediato y la liberación incondicional de los rehenes, así como un apoyo total a la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina (UNRWA).
La ineficacia del Consejo de Seguridad
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia ha señalado que la resolución sobre el alto el fuego «repite en gran medida el contenido» de un borrador que fue vetado por Estados Unidos en el Consejo de Seguridad el mes pasado. Esta situación ha generado un clamor internacional por la necesidad de un cese de hostilidades y el acceso humanitario en Gaza, considerados imperativos morales en las circunstancias actuales.
Desde el inicio de la guerra el 7 de octubre de 2023, más de 45,000 palestinos han perdido la vida, mientras que el ataque sorpresa de Hamas dejó alrededor de 1,200 israelíes muertos y más de 250 rehenes. La postura de Estados Unidos y de Israel, que argumentan que un alto el fuego beneficiaría a Hamas, ha sido criticada por muchos observadores internacionales, quienes consideran que la falta de acción efectiva por parte del Consejo de Seguridad es un reflejo de la influencia desproporcionada de Washington en la ONU.
Israel ha acusado a UNRWA de colaborar con Hamas, lo que ha llevado a una campaña para desacreditar a la agencia y limitar su capacidad de operar en los territorios palestinos. Sin embargo, la respuesta de UNRWA ha sido clara: la decisión de Israel de bloquear sus operaciones es parte de una estrategia más amplia para delegitimar su papel en la asistencia humanitaria a los refugiados palestinos.
En este contexto, la Asamblea General de la ONU ha asumido un papel crucial, adoptando resoluciones que reflejan la urgencia de la situación en Gaza y la necesidad de un enfoque más equilibrado y justo en la búsqueda de la paz en la región. La incapacidad del Consejo de Seguridad para actuar efectivamente plantea serias dudas sobre su relevancia y eficacia en la resolución de conflictos internacionales.