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El rapero estadounidense Jay-Z, cuyo nombre real es Shawn Carter, se enfrenta a graves acusaciones de violación que han surgido recientemente. Su abogado, Alex Spiro, convocó a una rueda de prensa el 16 de diciembre en la sede de Roc Nation en Nueva York, donde defendió a su cliente y afirmó que “Carter no violó a un niño”. Durante la presentación, Spiro mostró una serie de diapositivas que, según él, evidencian las inconsistencias en el relato de la acusadora.
El 8 de diciembre, se presentó una demanda civil en el Distrito Sur de Nueva York, en la que se alega que Carter violó a una niña de 13 años en compañía de Sean “Diddy” Combs durante una fiesta posterior a los premios MTV VMAs de 2000. Tanto Carter como Combs han negado las acusaciones.
Spiro también intentó desvincular a su cliente de Combs, enfatizando que “el Sr. Carter no tiene nada que ver con el caso del Sr. Combs”. Afirmó que su relación se limitaba a un contacto profesional y que las acusaciones en su contra son infundadas.
Las acusaciones contra Combs se han intensificado en los últimos meses. En noviembre de 2023, la exnovia de Combs, Cassie Ventura, presentó una demanda civil por violación, abuso y tráfico sexual. Combs rápidamente llegó a un acuerdo, sin admitir culpabilidad, lo que abrió la puerta a múltiples demandas en su contra. Actualmente, se enfrenta a cargos federales relacionados con tráfico sexual, crimen organizado y transporte para participar en prostitución, habiendo declarado no culpable y esperando juicio en mayo de 2025.
La denuncia anónima que vincula a Carter fue presentada por una mujer identificada como Jane Doe, quien alega que fue violada por un “celebridad A” (Carter) y Combs cuando tenía 13 años, durante una fiesta en una mansión a las afueras de Nueva York. Doe sostiene que fue coaccionada para firmar un acuerdo de confidencialidad y sospecha que le dieron una bebida adulterada.
El 13 de diciembre, Doe concedió una entrevista a NBC News en la que detalló sus acusaciones, aunque también se señalaron varias inconsistencias en su relato. Por ejemplo, mencionó haber conversado con Benji Madden en la fiesta, pero su representante indicó que él estaba de gira en ese momento. Doe también afirmó que fue llevada a la fiesta por un amigo, pero su padre no recuerda haber realizado un viaje de tantas horas para recogerla tras el supuesto ataque.
Spiro ha calificado la demanda contra su cliente como un “extorsión masiva”, argumentando que Carter fue seleccionado para forzar el pago de una suma exorbitante de dinero. En respuesta a las acusaciones, Jay-Z ha manifestado su inocencia y ha criticado el impacto que este tipo de demandas pueden tener en las verdaderas víctimas de abuso.
En el transcurso de la presentación, Spiro expresó que Carter se siente afectado por las acusaciones y que su familia también ha tenido que lidiar con las repercusiones de esta situación. “Está molesto porque alguien pueda hacer esto”, declaró el abogado. Además, prometió que muchas personas se presentarían para desmentir la existencia de la fiesta en la mansión, como se alega en la demanda.
El caso ha captado la atención de los medios y del público en general, no solo por la gravedad de las acusaciones, sino también por la prominencia de los implicados en el mundo de la música y el entretenimiento. Las próximas semanas serán cruciales para el desarrollo de este caso y la reputación de los artistas involucrados.