Gerard Piqué ha vuelto a captar la atención del mundo del deporte con su iniciativa más reciente, la Kings World Cup Nations, un torneo que busca replicar el formato de la popular Kings League pero con selecciones nacionales. Este nuevo proyecto ha sido anunciado en un tono provocador, lo que no es extraño viniendo del exjugador del FC Barcelona, quien ha mantenido una rivalidad histórica con el Espanyol.
En un intento por dar más visibilidad a su torneo, Piqué ha lanzado un reto al equipo blanquiazul, sugiriendo un enfrentamiento que él considera de un nivel comparable al de la selección española. Para incentivar este hipotético partido, ha propuesto un premio de un millón de euros para el equipo ganador, una cifra que, sin duda, llama la atención de los aficionados y de los medios de comunicación.
El excapitán del Barça ha hecho esta propuesta a través de una carta que incluye un tono de sorna hacia el Espanyol, citando su nombre completo y remarcando su deseo de que el equipo perico acepte el reto. Hasta el momento, la respuesta del club ha sido silenciosa, pero no así la de algunos jugadores de la Kings League.
Reacciones de la Kings League
Uno de los jugadores que ha aprovechado la situación es David Soriano, integrante de Porcinos, equipo de la Kings League dirigido por el streamer Ibai Llanos. Soriano ha expresado su descontento ante la propuesta de Piqué, sugiriendo que en lugar de ofrecer un premio a un hipotético partido, debería redistribuir el millón de euros entre los jugadores de su liga, quienes, según él, perciben salarios bajos. «Reparte el millón a los jugadores de tu liga que cobramos 400 euros de mierda», afirmó, provocando reacciones encontradas entre los aficionados.
En respuesta a las críticas que ha recibido por su comentario, Soriano ha aclarado que su presencia en la Kings League es una elección personal y que cuenta con un empleo a jornada completa. Este intercambio de opiniones refleja la tensión que existe entre el espectáculo que busca crear Piqué y la realidad económica de los jugadores en ligas alternativas.
Este nuevo episodio en la carrera de Piqué no solo pone de relieve su habilidad para generar controversia y atención mediática, sino que también subraya las tensiones existentes en el ecosistema futbolístico español, donde la búsqueda de nuevas audiencias y formatos de competición a menudo entra en conflicto con la tradición y la estructura de los clubes más establecidos.